- Bayardo Arce, asesor económico del presidente Daniel Ortega, adelanta que reducirán exoneraciones
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El Gobierno anunció ayer que impulsará una reforma fiscal, que incluirá una reducción de las exoneraciones que se otorgan a diversos sectores y que estaría lista antes del próximo encuentro que sostendrá con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en abril, en el marco de la negociación del nuevo programa económico.
El asesor económico de la Presidencia, Bayardo Arce, anunció la reforma, pero no explicó el alcance que tendrá, según dijo al ser citado por la agencia internacional de noticias ACAN-EFE.
Aunque indicó que procurarán que estén listas en abril próximo cuando se reúnan con el FMI, en la segunda ronda de negociaciones en busca de un acuerdo económico.
El representante del FMI en Nicaragua, Humberto Arbulú, dijo desconocer la iniciativa anunciada por Arce, tras ser consultado ayer por LA PRENSA.
Al ser consultado si el FMI, para firmar un nuevo programa económico había pedido al Gobierno alguna reforma fiscal respondió: “Nosotros hemos escuchado al Gobierno, (pero) no le hemos planteado que trabajen nada”, respondió Arbulú.
“El Ejecutivo nos ha manifestado el interés de trabajar en un número determinado de acciones y eso es lo que yo puedo decir sobre el tema”, manifestó.
La semana pasada una misión técnica del FMI estuvo en Managua para iniciar las primeras pláticas con el Gobierno, de cara a un nuevo acuerdo económico.
DGI “PERDIDA”
El titular de la Dirección General de Ingresos (DGI), Walter Porras, mencionó que ignoraba lo expuesto por Arce.
Sin embargo comentó que: “si el comandante Arce lo dijo pues él sabe lo que dice”, añadió a LA PRENSA.
No obstante, Porras reiteró en febrero, en entrevista con LA PRENSA, que el Gobierno no tenía planificado establecer reformas tributarias en el país de cara al programa con el FMI.
LA PRENSA intentó conocer más detalles de las medidas planteadas por Arce con el Banco Central de Nicaragua (BCN), que encabeza las negociaciones con el FMI, pero al cierre de esta edición no habían dado respuesta. El Ministerio de Hacienda y Crédito Público (MHCP) prometió pronunciarse la próxima semana, indicó la Dirección de Prensa de esta entidad.
José Adán Aguerri, presidente de la Cámara de Comercio de Nicaragua (Caconic), adscrita al Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), apuntó que oficialmente no conoce la anunciada reforma fiscal.
“Extraoficialmente sí habíamos escuchado de que el Gobierno estaba revisando, por ejemplo, las exoneraciones por sector, de cualquier manera esperamos que las medidas sean consensuadas con todos los sectores, incluyendo a los empresarios”, añadió.
Aguerri, sin embargo, adelantó que con una eventual reforma tributaria no esperan la creación de nuevos impuestos.
“Sí estaríamos de acuerdo con la ampliación de la base tributaria, aunque para eso el Ejecutivo tendría que hacer toda una revisión”, manifestó.
Economistas como Sergio Santamaría han sostenido que las exoneraciones deben tener un período exacto de aplicación.
Además han sugerido que se establezca en Nicaragua, un sistema tributario equitativo donde el que gasta más, pague más y el que gasta menos, pague menos.
Las exoneraciones fiscales, según diversas estimaciones, alcanzan entre 3,500 y más de 5,000 millones de córdobas al año.
CUESTIONA A MEDIOS
Arce planteó ayer que en la próxima reunión con el FMI, prevista para mediados de abril, van a presentar el plan económico del Poder Ejecutivo, “que abarca luchar contra la pobreza”.
Insistió en que para lograr ese objetivo van a procurar aplicar la reforma tributaria y racionalizar las exoneraciones que gozan diversos sectores, de las que, adelantó, algunas serán reducidas y otras eliminadas.
El funcionario argumentó que si hay un sector que en la actualidad goza del beneficio de las exoneraciones y genera “miles” de empleos, dinamiza la economía y reproduce ingresos a favor de la sociedad, continuará con ese privilegio por “un tiempo”, que no precisó.
Pero “si no produce eso, no se le va a dar exoneraciones”, aclaró Arce, quien recordó el caso de los medios de comunicación, que según él, gozan de exoneraciones en sus materias primas, pero a su juicio no generan “miles de empleos”.