14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Arístides Vargas, dramaturgo y director del grupo Malayerba. (LA PRENSA /O. VALENZUELA)

El dramaturgo de Malayerba

El afamado director de teatro Arístides Vargas, habla de Danzon Park y su puesta en escena por actores del Grupo de Teatro Justo Rufino Garay [doap_box title=”PREMIOS” box_color=”#336699″ class=”archivo-aside”] La Razón Blindada, mejor propuesta teatral, mejor obra y puesta en escena en Feria Internacional de teatro y danza de Huesca, España 2005. Guión cinematográfico Entre […]

  • El afamado director de teatro Arístides Vargas, habla de Danzon Park y su puesta en escena por actores del Grupo de Teatro Justo Rufino Garay
[doap_box title=”PREMIOS” box_color=”#336699″ class=”archivo-aside”]

La Razón Blindada, mejor propuesta teatral, mejor obra y puesta en escena en Feria Internacional de teatro y danza de Huesca, España 2005.

Guión cinematográfico Entre Marx y Una Mujer Desnuda. Mejor Guión en el XII Festival de Trieste, Italia. Nominada para el Premio Goya a la Mejor Película Extranjera de Habla Hispana que concede la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, 1997.

La Edad de las Ciruelas, Premiada con los galardones más importantes de la VI Muestra de Teatro de Barcelona (Mejor Espectáculo, Mejor Actriz y Premio Especial del Público). Premio Villanueva en La Habana. 2002. Premio a la obra del año en Brasil Nuestra Señora de las Nubes.

Festival de Teatro de La Habana, Premio a mejor obra

Donde el Viento Hace Buñuelos, mejor obra en Costa Rica. Premio de la Crítica de Puerto Rico por mejor obra 1998. Ecuador Premio por mejor trabajo de dramaturgia.

[/doap_box]

Cuando Arístides Vargas habla, hay una sorprendente mezcla de acentos. Por allá llega un toque cubano, un matiz argentino, una frase muy española o una interjección colombiana.

Y es que este argentino, radicado en Ecuador desde 1976 dice pertenecer a la “Patria de los afectos”, porque es más poderosa y aglutinadora.

Arístides Vargas es considerado por la crítica especializada como una de las voces más significativas del teatro latinoamericano contemporáneo. Múltiples obras y premios aunados a una labor intensa con el grupo Malayerba vienen siendo su carta de presentación. No necesita nada más.

Así, con sus múltiples acentos, le traemos a este hombre sencillo, que ríe de forma plena, mientras medita sobre el arte, la poesía y el teatro.

Algunos críticos consideran que sus últimas puestas han tenido dificultades con el ritmo de las secuencias. ¿No llegan a la altura de otros trabajos suyos?

No he visto esas críticas pero creo que el ritmo es muy personal y en mis últimas obras yo creo que no se apela tanto a la emoción como en otros trabajos, sino a lo racional, de ahí la diferencia.

Pero acá vimos una puesta de Donde el Viento Hace Buñuelos por un grupo de Costa Rica y hubo deficiencias de ese tipo.

Donde el Viento Hace Buñuelos es una obra muy difícil de llevar a escena, tiene mucho que ver con los actores que encarnan a los personajes; por ejemplo, en Buenos Aires las críticas fueron extraordinarias. En realidad, ese texto lo hice para una actriz puertorriqueña que lo lograba a la perfección. El personaje no es una persona, es una fuerza, un vector de una fábula. El teatro es una metáfora poética, quienes están acostumbrados a mis obras saben que trabajo con ese sentido, son recursos que se repiten.

A propósito en sus obras, siempre hay un tema que se repite, me refiero al rescate de la memoria, a los recuerdos, ¿cree que el hecho de ser migrante le haya signado en ese sentido?

Sí, definitivamente. Yo salí de Argentina en 1976, cuando la dictadura militar. Cuando uno sale de un espacio, éste queda como detenido e idealizado, y aunque tú vuelvas no es lo mismo. Nunca vas a volver a tu espacio porque, incluso tú ya no eres igual, entonces hay un territorio interno que también queda congelado. Para mí, la metáfora es el viaje, estamos viajando, en el camino nos encontramos y siempre volvemos a ciertos lugares por motivos felices o porque nos castigaron, volvemos por el profundo miedo que nos despierta ese espacio o por el profundo amor.

Y ese tema es importante, aunque no trato de solucionarlo, trato que seamos conscientes que uno puede estar fuera de sí, aunque esté en su misma casa. El tema del exilio no es un estado existencial, la migración es un tema social, espiritual, existencial y tiene muchas connotaciones.

¿Ha pensado regresar definitivamente a Argentina?

Yo regreso frecuentemente a Argentina, hago allá diferentes proyectos, voy a dar talleres. Me siento argentino pero de una Argentina que quizás ya no exista, soy la franja de personas que conozco en todos lados, para mí la patria es la patria afectiva, la patria de los afectos, que es más poderosa que el lugar donde uno nace, uno puede nacer en un lugar, pero puede ser por error, por accidente, pero hay un territorio afectivo que es el que te da sentido. En la vida donde hay tantos desórdenes, lo único que puede darte un cierto orden son los afectos.

Fue co-fundador de Malayerba, ¿qué significa tantos años de trabajo con ese grupo, uno de los más conocidos en el mundo teatral y sinónimo de modernidad, teatro de experimentación y creatividad?

Es un espacio y una encrucijada donde se cruzan diferentes actores y diferentes creadores de varios países latinoamericanos y de España, siempre ha estado relacionado con ese territorio que constituye una utopía, el territorio artístico, y digo utopía porque no tiene pretensiones de ser verdad, y en él podemos ensayar ciertas ideas que tenemos sobre la vida, no necesariamente la vida tiene que ser la realidad; por eso podemos hablar de un territorio ficcional. En la actualidad somos varios directores, eso nos permite el cambio, nos encerrarnos en una teatralidad; por ejemplo, yo tengo mis temas, pero hay otros intereses como Charo Francés que tiene preferencia por los temas feministas y la condición de género. Hay muchos creadores, es un grupo de este tiempo, se hacen preguntas y de esas diferencias se toman acuerdos poéticos en el escenario. Acuerdo general sobre el teatro que queremos hacer, diferentes teatralidades conviven en ese territorio que se llama Malayerba. Pero lo que sí sabemos que el teatro debe estar al lado de las personas, a favor de las personas.

En el caso de Danzon Park, que trata el tema del héroe que traiciona sus ideales de juventud, ¿qué asidero encuentra con relación a Nicaragua?

Nicaragua es un universo donde se debaten ciertas ideas, un lugar donde hay ciertas contradicciones. En el caso de Danzon Park en específico vemos la teoría del héroe, que únicamente puede existir si existe un traidor, sólo la contradicción da sentido a una identidad.

Pero ¿qué relación ve con la historia de los líderes de la región, que han traicionado sus ideales iniciales y defraudado a su pueblo?

En el contexto de Nicaragua donde la guerra está muy cerca todavía, se puede afirmar que los mártires murieron creyendo en algo, una causa, como Carlos Fonseca. Somos seres históricos, nadie se propone ser un héroe hasta que se lo propone, el proceso de llegar a ser un traidor es inconsciente y en algún momento crees en otras ideas que no son aquellas por las que mataste o te dejabas matar, como contingente social. Este tema se toca en La Casa de Rigoberta Mira al Sur, donde el marido, que fue un revolucionario, se convierte en banquero. Los seres humanos somos débiles, sucumbimos ante muchas cosas.

¿Qué trabajo hizo con el Justo Rufino Garay y para qué?

Trabajamos en un nuevo montaje de Danzon Park, hacemos un reemplazo, el supuesto traidor lo hará Roberto Carlos Guillén. Esta puesta va a ser parte de las presentaciones del Justo Rufino en su temporada en Managua, pero también irá a Colombia y Venezuela, al Festival de Teatro de Occidente. Habrá una retrospectiva de teatro mío por diferentes grupos y se escogió al Rufino con Danzon Park, debemos recordar que este grupo ha participado en 18 festivales internacionales con obras mías y en el 2004 fue seleccionada la mejor compañía de Latinoamérica por La Casa de Rigoberta Mira al Sur. En Nicaragua las puestas serán el 24 y 25 de agosto a las 5:00 p.m.

¿Cómo valora el trabajo del Justo Rufino Garay?

Es uno de los grupos más estables de Nicaragua y de Centroamérica, ha trabajado mucho, especialmente Lucero Millán, René Medina y Alicia Pilarte, en función de un proyecto teatral, lamentablemente, sin ningún tipo de ayuda estatal. El Estado no debe eludir la responsabilidad de ser partícipe del ejercicio espiritual del arte y eso necesita ser respaldado porque es una inversión de carácter espiritual, porque da mejores personas y en se sentido el Estado debe reconsiderar la cultura y darle un apoyo.

Hay una falacia de los gobiernos porque piensan que el problema económico es lo fundamental, un país tiene múltiples problemas pero todas las cosas son importantes, con importancias diferentes. A veces se lavan las manos y dicen “primero resolvemos la economía y después veremos la cultura”. ¿Qué pretenden? Tendrán un montón de gente rica pero bruta, sin cultura ni sensibilidad. En nuestros países hasta los ricos son pobres, en su espíritu.

¿Tiene otros proyectos acá en Nicaragua?

Quisiera hacer en Centroamérica un taller de dramaturgia y de puesta de las obras creadas, soy dramaturgo, director y actor, y me gusta ver el proceso de creación completo. Me gustaría un taller relativamente largo como el que hice en Puerto Rico.

La Prensa Literaria

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí