- Cartas al Director
Esfuerzo
“Los científicos se esfuerzan por hacer posible lo imposible. Los políticos por hacer lo posible imposible”.
¿El pueblo presidente?
El pasado martes 11 de diciembre del corriente escuché nuevamente al señor Daniel Ortega, en la graduación de nuevos cadetes, decir que el pueblo es el Presidente y que sus decisiones deben ser tomadas en cuenta por todos los ministros y diputados que conforman la Asamblea Nacional, para la creación de nuevas leyes que vengan a beneficiar a todos los nicaragüenses.
Le pregunto al señor Ortega si realmente está hablando en serio, ya que de ser así no tiene caso que esté ocupando ese mismo cargo y el doble salario que está devengando en la actualidad debería ser transferido al “pueblo presidente” en mayores obras de progresos, ya que el pueblo es el que se entendería directamente con la Asamblea Nacional para aprobar dichas leyes.
Que Ortega demuestre con hechos lo que dice frente a las cámaras de televisión y que no sea simplemente una forma de tratar de confundir a la gente, ni de ver al pueblo y a los ciudadanos como borregos.
Roberto Barrientos Pérez
Amnistía general
La proximidad de la Navidad ha obligado a la reflexión de nuestros políticos que se oponen cívicamente a los desafueros del FSLN y de su secretario general, el Presidente de la República, Daniel Ortega Saavedra. Han llegado a la conclusión que la única alternativa para evitar los chantajes a los dirigentes políticos y mantienen nuestra incipiente democracia al borde del abismo, es a través de una amnistía general.
El coordinador de la Comisión de Paz y Reconciliación Nacional, monseñor Miguel Obando y Bravo, Cardenal Primado de Nicaragua, tiene una oportunidad única de contribuir a hacer efectiva esa paz y esa reconciliación nacional que tanto necesita el pueblo nicaragüense. Contribuir con su autoridad moral y trabajando de común acuerdo con los diputados, a hacer efectiva la aprobación de esa Ley de Amnistía General.
Será entonces cuando todos los nicaragüenses podremos decir con espíritu de cuerpo, gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad.
Ricardo Zamora Valencia
Incredulidad
Leyendo el Diario LA PRENSA del 12 de diciembre del 2007, no pude dar crédito a lo que leí. ¿Cómo es posible que los diputados liberales del PLC y los que están en la Alianza Liberal (ALN-PC) estén pensando en darle una amnistía al ex presidente y “reo Arnoldo Alemán”?
Los señores diputados liberales-conservadores deben darse cuenta que al pueblo ya no pueden seguir engañándole, estamos cansados de sus desvergonzadas actitudes. Si alguno de ellos se siente rehén del presidente Ortega Saavedra es porque tiene cola que le pisen.
Para que verdaderamente haya paz en Nicaragua y exista por primera vez en su historia una oposición constructiva, tienen que poner el dedo sobre la llaga y hacer patria, enviando al ex presidente y reo Alemán a la cárcel, que es donde debe estar y que nunca ha estado y no venirnos con el cuento de que van a darle la amnistía, esto sí que es una vergüenza.
Al Poder Legislativo le llegó la hora de demostrarnos que van a poner la casa en orden. Muchos nicaragüenses le decimos No a la amnistía, Sí a la democracia, a la justicia social, al respeto a la libertad de expresión, respeto absoluto a la Constitución. No queremos más pactos. Sean honestos y transparentes.
Que esta Navidad sea de bendiciones para el empobrecido pueblo de Nicaragua. La oposición tiene que unirse para no permitir los atropellos que el Gobierno, como resultado del nefasto pacto del ahora Presidente y del reo ha venido cometiendo.
Que Dios bendiga a Nicaragua y que en esta Navidad el Señor nos regale un mejor gobierno. Y esto va para todos los poderes del país, que sean consecuentes con su pueblo, que no manipulen, que trabajen para el beneficio de todos, porque todos somos hijos de la misma Patria. Queremos ganarnos el pan de cada día con el sudor de nuestro trabajo y garantizarles a nuestros hijos un futuro mejor.
Amy Saballos Flores
CPC y DGSE
Los dirigentes de los CPC de cada barrio no serán ninguno de los que los habitan, porque estas funciones están siendo asumidas por los miembros de la antigua Seguridad del Estado sandinista, la que mantiene intactos sus cuadros bajo la dirección de Lenín Cerna Juárez, Juan Vicente Chávez y Primitivo Rodríguez Blandón. Son estos los que se movilizan, reúnen a los sandinistas censados en esos barrios y les presentan al coordinador designado por el FSLN.
Así es como están procediendo, utilizando las técnicas propias de la clandestinidad, en las que son maestros los sandinistas. Para mientras, están detectando a los que son empleados públicos, porque si estos no cooperan, los corren de sus centros de trabajo.
Léster Arróliga Cordero
Corderitos
Me alegra leer que algunos diputados están llamando a la cordura a Daniel Ortega. Es claro que a él y su esposa les falta cordura. Daniel Ortega pareciera ser sólo la caja de resonancia de esa señora. Definitivamente va llegando el momento de interpelar a la pareja presidencial porque no tiene capacidad necesaria para conducir el país.
Me causó hilaridad la expresión que usó Daniel Ortega contra los diputados del bloque opositor: “perros rabiosos” los llamó. ¿Y él qué piensa que es? ¿Será un corderito?
Estamos ante una situación de emergencia nacional en la que no podemos dar un paso atrás para defender nuestro país de la dictadura que nos quiere ahogar nuevamente. Los nicaragüenses tenemos en nuestras manos el mango de la sartén.
Los diputados valientes no deben dar ni un paso atrás en sus decisiones. Creo que la mayoría del pueblo los apoya.
Mari Aguilar
Apenado por amigo
Qué pena me dio ver en la televisión a mi amigo el doctor Gerardo Rodríguez, a quien conocí cuando impartíamos clases de Derecho en la Unica, en los medios de la televisión local tratando de defender lo indefendible.
El magistrado Rodríguez ha sido un profesor y un jurista competente, estudioso de las leyes, un profesional hasta ahora digno del foro que ocupa. Pero lástima que frente a juristas de su talla no tenía argumentos para defender la resolución del tribunal del que es presidente, que manda a detener el acto de publicación de la reforma a la Ley 290, rechazando el veto presidencial. Realmente sentí algo de pena cuando nervioso buscaba algunos artículos para refutar a los juristas que mantenían la posición correcta de la Constitución Política, los doctores José Pallais y María Asunción Moreno, respecto a la ilegalidad del recurso de amparo que personas sandinistas entablaron para impedir la publicación de la mencionada ley constitucional.
Mi amigo no pudo demostrar el derecho perjudicado o el bien lesionado en el recurso sobre el cual la Corte se manifestó a la velocidad del rayo, a pesar de que hay recursos que llevan meses sin respuestas.
Son pocos los magistrados de apelaciones que son dignos de estar ahí. Gerardo es de esos pocos, pero duele ver que personas valiosas tengan que someterse al poder político.
Luis Vega Miranda
Violación de derechos
Qué lamentable la posición del Gobierno sandinista en violentar los derechos de los trabajadores. Desde inicios de año personas humildes que necesitan de sus trabajos para dar de comer a sus familias, han sido despedidas en los diferentes ministerios del Gobierno sandinista. “Más trabajo, paz y reconciliación” son los lemas del actual Gobierno pero lo único que ha hecho es confrontar a los sectores sociales, crear más desempleo al despedir a los trabajadores de las diferentes instituciones y crear zozobra con sus políticas de intimidación a los que no están con el Gobierno.
Al contrario de lo que promulga el Gobierno, muchos trabajadores de la Salud fuimos despedidos hace menos de un mes, alrededor de 50 personas que no teníamos cargos de confianza; que no ganábamos cantidades enormes como sueldos, sino un salario mínimo; que no militábamos en el FSLN ni en Fetsalud. Por consiguiente, sin decir una palabra y sin ninguna justificación, nos dieron nuestras cartas de despidos aún siendo trabajadores que teníamos de 4 a 10 años de trabajar para el Minsa.
Ahora las nuevas autoridades de Salud les niegan a los trabajadores la canasta navideña, que por años ha sido una tradición entregarles como un estímulo a cada uno de los trabajadores, violentando el convenio colectivo.
Es necesario que el Gobierno reflexione ante las constantes violaciones que está haciendo el Gobierno, porque es injusto que muchas personas humildes tengamos que sufrir las consecuencias de una política gubernamental desacertada.
Ezequiel Ramón Pérez Lezama