El fortalecimiento de la situación financiera del Instituto Nicaragüense del Seguro Social (INSS) es uno de los compromisos fundamentales que el Gobierno de Nicaragua asumió ante el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el marco de un paquete de medidas que le permitirían al país mantenerse dentro del programa económico y presentarse a la cuarta revisión del mismo, posiblemente entre marzo y abril del 2010.
El presidente del Banco Central de Nicaragua (BCN), Antenor Rosales, detalló ayer que al compromiso de aprobar los proyectos de Ley de Concertación Tributaria y del Presupuesto General de la República del 2010, a más tardar el 31 de diciembre próximo, se le suma tener actualizado a esa fecha un informe sobre la situación del Seguro Social y la aprobación de la nueva Ley Orgánica del BCN, que se encuentra desde junio en la Asamblea Nacional.
Este paquete de compromisos y su cumplimiento son indispensables para que el país nuevamente se presente ante el directorio del FMI en marzo o abril del 2010 y, de aprobar el examen, obtener el desembolso de 17.8 millones de dólares.Rosales se reunió ayer con directivos del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep).
EN CARTA DE INTENCIONES
Tanto el FMI como el BCN divulgaron ayer, en sus respectivas páginas electrónicas, la carta de intenciones que el Gobierno de Nicaragua, en la persona de Rosales y del Ministro de Hacienda , Alberto Guevara, enviaron al director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, en la que plasman los compromisos asumidos por el Gobierno.
Rosales, al término de la reunión con el Cosep, sostuvo que les leyó a los empresarios el párrafo de la Carta de Intenciones que habla del fortalecimiento del Seguro Social.
“El INSS aprobará antes de fin de 2009 un aumento de uno por ciento en la tasa de cotización a la seguridad social para su entrada en vigor en enero de 2010. Dicha medida estará acompañada de una política de gasto en pensiones y prestaciones médicas, consistente con la mejora de las finanzas del sistema en 0.5 punto del PIB en 2010. Para un fortalecimiento más integral del sistema, antes de fin de 2009 se finalizará un nuevo estudio actuarial del sistema vigente”, dice la carta.
Ese uno por ciento, equivalente a 300 millones de córdobas, será asumido por los empresarios. Mientras que los trabajadores tendrán que conformarse en el 2010 con un solo ajuste del salario mínimo, en lugar de dos.
El presidente del Cosep, José Adán Aguerri, no llegó a rechazar este incremento del uno por ciento que elevaría a 16 por ciento el aporte patronal al Seguro Social, pero dijo que el tema será analizado por los asesores del gremio.
Recordó que esta medida vendría a caer sobre las empresas formales, las mismas que soportarían el incremento de los impuestos si se aprueba la Ley de Concertación Tributaria.
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