14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Fichas de dominó gigantes se han colocado a lo largo de la ruta del muro de Berlín las cuales serán derribas como símbolo de esa gran fecha histórica. LA PRENSA/AFP/John MacDougall

Berlín se alista para conmemorar caída del Muro

Berlín vive la conmemoración del vigésimo aniversario de la caída del Muro convertida en un plató mediático para revivir su noche más hermosa, la del 9 de noviembre de 1989, la que precipitó el proceso de reunificación alemana y su resurgir como nueva capital de la potencia europea.

Gemma Casadevall

BERLÍN/EFE

Berlín vive la conmemoración del vigésimo aniversario de la caída del Muro convertida en un plató mediático para revivir su noche más hermosa, la del 9 de noviembre de 1989, la que precipitó el proceso de reunificación alemana y su resurgir como nueva capital de la potencia europea.

De símbolo de la Guerra Fría al nuevo Berlín que no oculta los estragos de la historia: la escenografía del acto central del próximo lunes, con el derribo de un dominó de 1.5 kilómetros, desde la Potsdamer Platz a la Puerta de Brandeburgo, difundirá por todo el planeta esa imagen de ciudad poderosa, revitalizada desde su desgarro.

Medios de todo el mundo copan el centro de la capital, recorren las huellas dejadas por los 155 kilómetros de Muro que durante 28 años rodearon su sector occidental y entrevistan a ciudadanos corrientes y políticos de uno y otro lado en busca de su testimonio.

La grandeza de la noche del 9 de noviembre consistió en la respuesta espontánea de las decenas de miles de ciudadanos que se lanzaron sobre la frontera. Será difícil que una escenografía, por perfecta que resulte, supere la carga emotiva contenida en las imágenes de entonces.

Para Berlín es una oportunidad de mostrar su actual epidermis, que alterna las cicatrices históricas con la nueva ciudad surgida en lo que durante décadas fue tierra de nadie, junto al Muro, como la Potsdamer Platz.

El 9 de noviembre fue la culminación de la Revolución Pacífica, que de la consigna del “Wir sind das Volk” -“Nosotros somos el Pueblo”- de las primeras marchas minoritarias desembocó en semanas en manifestaciones masivas en todo el país.

La presión era insostenible para la República Democrática Alemana (RDA), presionada además por la “Perestroika” de Mijail Gorbachov. El comunicado que precipitó la apertura de las fronteras, el 9 de noviembre, derribó los últimos diques de contención.

A la noche que pasó a la historia como la de la caída del Muro siguieron muchos días y noches de euforia, con caravanas de “Trabis” -el coche arquetípico germano-oriental- cruzando al otro lado.

La Puerta de Brandeburgo siguió cerrada durante cierto tiempo, mientras las grúas se llevaban, bloque a bloque, no sólo el centenar y medio de kilómetros de hormigón que rodeó el Berlín occidental, sino los 1.400 que formaron la frontera divisoria, de norte a sur, entre la RDA y la República Federal de Alemania (RFA).

Desarmar el Muro llevó meses, en los que el ruido de la maquinaria iba parejo al martilleo de berlineses y turistas a por su reliquia.

Paralelamente, se producía también el desmantelamiento del Politb ro -y la celebración de las primeras elecciones libres de la RDA -en mayo de 1990-, que ganó la CDU del canciller Helmut Kohl.

En julio entró en vigor la unificación monetaria y después Kohl y Gorbachov anunciaron el acuerdo que, tras duras negociaciones, dio luz verde a la reunificación, con la aquiescencia de las restantes potencias aliadas -EEUU, Reino Unido y Francia-. La RFA seguiría integrada en la OTAN, la RDA se desmembraba del Pacto de Varsovia.

El 3 de octubre de 1990 se firmó el Tratado de Unidad por el que el territorio de la RDA se integró en la RFA. Fue una absorción, que arrasó con el régimen germano-oriental, pero también con los referentes y señas de identidad de sus 16 millones de habitantes.

Berlín tardó aún en recuperar la capitalidad perdida con la derrota del Tercer Reich (1945) y la división del país entre las cuatro potencias vencedoras de la II Guerra Mundial. Durante todas esas décadas, el Parlamento y gobierno de la RFA quedaron alojadas en la llamada “aldea federal”, Bonn.

A la clase política le costó dejar la tranquila ciudad renana para mudarse a Berlín, ciudad no necesariamente querida por muchos alemanes, primero por prusiana, después por capital del Reich, después por ser símbolo de la Guerra Fría.

Finalmente, el 20 de junio de 1991, y por el estrecho margen de 17 votos de diferencia, el Parlamento aprobó la mudanza a Berlín, lo que a su vez llevó largos preparativos hasta consumarse en 1999.

Veinte años después de la caída del Muro y un decenio después de recuperar la capitalidad, Berlín sigue siendo una ciudad patas arriba y algo incómoda, para algunos, pero fascinante para muchos otros, precisamente porque extraer belleza de sus cicatrices.

Puede interesarte

COMENTARIOS

  1. Robespière
    Hace 14 años

    Ese es, ni más ni menos, el mismo muro al que Daniel Ortega llamó “el muro de la dignidad” en una ocasión que visitó Berlin Oriental. Nosotros, los becados, nunca pudimos conocer Berlin Occidental, porque en la embajada nicaragüense en Berlin Oriental nos quitaban los pasaportes para que no conociéramos la Libertad. Estabamos como en una jaula gigantesca, igual que los alemanes orientales. Ese es “el muro de la dignidad” que antes tanto alababa el presidente de pipiripago que tenemos hoy. ¿Han visto un burro manejando Mercedes Benz? ¿Todavía no? Entonces vayan a Managua, a El Carmen.

  2. Anita Guido
    Hace 14 años

    Solo una persona ingnorante como el dictador Ortega pudo haber llamado al muro de Berlin el muro de la dignidad y querer imponer de nuevo ese patron politico en Nicaragua que evidentemente no funciono y quedo obsoleto .Nicaragua tendra de nuevo dignidad cuando esta familia este detras de los muros .. de una prision .

  3. Ronaldo Monteleon
    Hace 14 años

    “Mr. Gorvachov, derriben este muro”, dijo Ronald Reagan en el portal de Brandenburgo el 12 de junio de 1987, sus asesores politicos quedaron atonitos pensaron que aquellas palabras podrian afectar la fragilidad de las relaciones con Moscu., Reagan fue un estadista de altura con aguda vision, el hombre conocia el momento historico que vivia.
    Dos anos y medio despues el muro fue derribado, ese muro fatidico que fue la verguenza de los Alemanes fue simbolo de opresion y plexo solar del maligno imperio comunista.

  4. labrujita
    Hace 14 años

    Es una alegria para el pueblo Aleman y al mundo entero ;” Los muros son divicionistas , separatistas son una verguenza , esa manera de humillar al ser humano es lo mas bajo que un gobierno puede hacer.en la frontera al norte de Mexico hay uno y se llama “” ELMURO DE DEMOCRACIA Y LA LIBERTAD” esta dicenado para detener inmigrantes que huyen de regimenes com el que tenemos nosotros ,el de Honduras,Venesuela vaya parece que las palabras de Reagan el viento se las llevo. con este muro Gringo la Democracia Gringa es farsa,comen de Produtos hechos en CHINA,ironico e hipocritas alavez poque elpueblo chino esta oprimido por COMUNISTAS. se les prohibe a los ciudadanos(USA) ir a Cuba pero Bush si fue alas Olimpiadas enChina. . .por eso el mudo esta jodido, ya no hay a quien creer… la crisis aumenta ,el desempleo sigue,eldolar se debilita.no ganan las guerras en medio Oriente ? Que clase de Imperio es este?.

  5. carlos
    Hace 14 años

    Querer limitar las libertads es el mayor craso error que un gobierno pretende ejercer contra un país, aqui en Nicaragua através del miedo de laas turba nos quieren someter pero cuan equivocados estais , nosotros no debemos bajo ninguna circunstancia dejar que este régimen de muestra de tal intención, salva al pueblo Álemán que este 9 de noviembre celebrarán 20 años de aquel oprobioso muro, en Nicargua prefiero comer arroz y frijoles en libertad que me den regalía a costa de la libertad, oro por CUBA, que un día puedan nadar en libertad y salir de su amado país sin ninguna restrcción, ese muro debe de caer, aprendamos de los Alemanes.

  6. Zeledón
    Hace 14 años

    Con todo respeto,
    Interesante dato…Pienso que no existe un “buen imperio” llámese comunista, socialista, capitalista, neo-liberal, orteguista,… por el simple hecho de denominarse “imperio” es maligno.
    No es una novedad escuchar comentarios sobre la política internacional de los Estados Unidos y la manera en que la administración Reagan se involucró con la caída del bloque socialista.
    Pero, por favor Sr. Ronaldo no le parece una falta de respeto para nuestros hermanos de Nicaragua estar elogiando a Ronald Reagan por ser un “buen estadista”, cuando fue él una de las personas que se encargó de financiar una guerra en Nuestra Nicaragua? Es un hecho invorrable que el ejército Sandinista recibió fondos, armamentos de la ex- Unión Soviética dejando una deuda externa sin precedentes en Nicaragua. Es obvio que Ortega y muchos otros que se hacían llamar sandinistas fueron copartícipes de esa guerra.
    Cito aquí una humilde muestra del escándalo conocido como “Irán-Contras”; publicado por la BBC Mundo:
    “En ese año, el presidente [Reagan] fue forzado a admitir que había aprobado el envío de equipamiento militar a Irán, una franca contradicción a la política de Estado.

    Después se descubrió que las ganancias de la venta de armas a los iraníes sirvió para financiar a la “Contra” rebelde que luchaba en contra del gobierno de izquierda sandinista en Nicaragua.”

    Está más que claro; Ortega y el neo-chamuquismo es la encarnación de la inmoralidad. No se debe confudir entre Sandinismo y Chamuquismo.

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí