Gobierno suspende subvenciones a
albergues de Mifamilia; niños siguen en las calles un año después que Primera Dama prometió sacarlos
Moisés Martínez y Jeniffer Castillo Bermúdez
El Ministerio de la Familia, Adolescencia y Niñez, está suspendiendo las subvenciones a los albergues de niños y adolescentes debido a la iliquidez en que se encuentra.
Debido a la gravedad de esta situación, las autoridades de esta entidad buscan “maquillar” la medida argumentado que ésta forma parte de los ejes del Programa Amor, una rimbombante iniciativa impulsada por la primera dama Rosario Murillo, desde octubre del 2008, y que aparentemente también se encuentra estancado por la misma falta de recursos.
LA PRENSA tiene en su poder una de las notificaciones oficiales enviadas por las autoridades de Mifamilia a los albergues, en la cual se les informa la suspensión de la subvenciones del Estado hacia estos centros que se especializan en rescatar a niños y adolescentes de su condición de callejeros.
Moisés Martínez y Jeniffer Castillo Bermúdez
El Ministerio de la Familia, Adolescencia y Niñez, está suspendiendo las subvenciones a los albergues de niños y adolescentes debido a la iliquidez en que se encuentra.
Debido a la gravedad de esta situación, las autoridades de esta entidad buscan “maquillar” la medida argumentado que ésta forma parte de los ejes del Programa Amor, una rimbombante iniciativa impulsada por la primera dama Rosario Murillo, desde octubre del 2008, y que aparentemente también se encuentra estancado por la misma falta de recursos.
LA PRENSA tiene en su poder una de las notificaciones oficiales enviadas por las autoridades de Mifamilia a los albergues, en la cual se les informa la suspensión de la subvenciones del Estado hacia estos centros que se especializan en rescatar a niños y adolescentes de su condición de callejeros.
No se pudo conocer una postura oficial del Mifamilia sobre esta notificación y las razones verdaderas por las cuales la institución está suspendiendo los fondos, además de las presupuestarias, dado que esta cartera estatal es en teoría la instancia de ejecutar el Programa Amor.
El Programa Amor fue ofrecido por Murillo teniendo como meta (como cita el extinto boletín oficialista impreso El 19 en su edición del 22 al 26 de octubre del 2008) “sacar a todos los niños de la calle”.
La propaganda oficial exaltó el programa convirtiéndolo en emblemático de la “conciencia social” que el Gobierno del presidente Daniel Ortega promulga.
“Amor al Amor, Amor”, tituló Murillo en un escrito publicada en la edición del boletín oficialista citada, en el cual refería los ejes y los ambiciosos alcances augurados al Programa Amor
EL “RECURSO FAMILIAR”
Un poco más de un año ha pasado desde que se lanzó el Programa Amor y a la fecha se desconoce resultado alguno del mismo y más bien informes extraoficiales de fuentes vinculadas a Mifamilia aseguran que detrás de la medida lo que se busca en realidad es inflar los resultados del programa por medio de un eje que denominan “recurso familiar”.
Indagaciones periodísticas de LA PRENSA descubrieron que, además de la suspensión de los fondos, Mifamilia pretende iniciar una salida de los menores alojados en los albergues afectados para que éstos regresen con sus familias, como parte del “recurso familiar”.
La subvención del Estado representa un complemento para el sistema financiero de estos albergues. El impacto que tendrá este recorte en estos centros depende del porcentaje de los recursos propios con que cuenten o de donaciones que reciban.
LA PRENSA logró hablar con algunos administradores de estos centros que han recibido dichas notificaciones y en algunos casos la suspensión de la subvención implicaría hasta el cierre de éstos.
MEDIDA SERÁ EN TODO EL PAÍS
Fuentes de Mifamilia comentan que hasta el momento se habrían notificado a los centros de Managua, pero que el alcance de la medida es nacional. La preocupación de las autoridades de los centros afectados es la doble moral que hay detrás de la justificación del recurso “familiar” del Programa Amor.
Esto porque, en primer lugar, es deber del Estado dar cobertura y protección a los menores nicaragüenses, por lo que es insólito la suspensión de las subvenciones. Pero además sacar a los niños de los albergues es mandarlos de nuevo al entorno familiar del que precisamente fueron rescatados.
“El supuesto argumento es que hay que restituirle a los menores de edad el derecho de crecer con su familia. Suena bonito, pero es pura demagogia. ¿Cómo van a regresar a los niños a los lugares de donde fueron rescatados? Todos los niños que se encuentran en los centros de protección están ahí como una medida de salvaguardar su integridad por encontrarse en riesgo sus vidas. Fueron rescatados del entorno familiar porque eran abusados o sencillamente las condiciones de pobreza eran tan extremas que no se garantizaba un desarrollo y crecimiento normal y saludable”, dijo un administrador de un centro de albergue que pidió anonimato para evitar las represalias del Gobierno.
PROMETEN ALGO QUE NUNCA ES CIERTO
Mifamilia ha argumentado a los directores de los centros de albergue que actualmente realizan un estudio sicosocial sobre las ventajas del “recurso familiar” que darán seguimiento especializado a los menores reintegrados a las familias.
“Eso nunca es cierto. Te puedo adelantar por experiencias posteriores que llegado el momento de que deberían efectuar el tal seguimiento, no lo hacen por falta de combustible. Pero sí tienen combustible para movilizar a los trabajadores a marchas y concentraciones partidarias”, señaló el director consultado.
Los problemas financieros de Mifamilia se agudizan ante el evidente desinterés del Gobierno en promover la inversión en campos tan delicados como son el porvenir de la niñez y adolescencia del país.
Según el análisis sobre inversión en protección social a la niñez y la adolescencia 2005-2009, elaborado por Marvin García, del Instituto de Estrategias y Políticas Públicas (IEEPP), en el 2009 el presupuesto asignado al gasto social es de 12 millones 295 mil 18 córdobas y de este monto se dispuso del 6.65 por ciento para servicios y asistencia social.
DRÁSTICA REDUCCIÓN EN INVERSIÓN DE PROYECTOS
A esta reducción drástica en la inversión de proyectos que garantizan la asistencia social del país se suma la actual inestabilidad institucional que vive el Mifamilia, que se supone es la garante de la protección social de Nicaragua.
Hace tres meses se conoció que alrededor de 20 trabajadores de ese Ministerio fueron despedidos y se corría el rumor de 42 despedidos más. Actualmente los 24 trabajadores que fueron despedidos el pasado mes de agosto siguen a la espera del pago de su liquidación.
“Sólo nos dicen que no hay dinero, que nos esperemos porque no tienen plata para pagarnos. Eso es lo último ya, no sé cómo es que nos despiden si saben que no tienen para liquidarnos”, expresó uno de los despedidos.
“Del 2005 al 2009 hay una reducción sumamente drástica y no sólo en lo que respecta a presupuesto, sino también a su situación institucional. Mifamilia no es un ministerio que esté siendo tomado en serio por el Gobierno. Al trasladar a la vicedirectora del Instituto Nacional del Turismo (Intur), Meyling Calero a ministra del Mifamilia y quitar a la coordinadora de proyectos, se debilitan los programas sobre protección social”, dijo Claudia Pineda, directora ejecutiva del Instituto de Estrategias y Políticas Públicas (IEEPP).
Los despidos masivos en esta institución han afectado áreas sensibles para la ejecución del insigne Programa Amor, que hasta la fecha no se conoce cuál es el impacto que ha tenido.
GOBIERNO QUIERE CUMPLIR A COMO DÉ LUGAR
Uno de los despedidos y quien hasta hace unos cinco días laboraba en uno de los ejes del Programa Amor, explicó que las intenciones del Gobierno son alcanzar las metas establecidas con el Programa Amor a “como dé lugar” y sin importar que el impacto del mismo sea negativo o positivo.
“Están viendo que el programa no les está funcionando y que no se están alcanzando las metas esperadas. Ése es el apuro que se tienen. Por ejemplo, hay niños en los hogares sustitutos que tiene el Ministerio en todo el país, pero bajaron la cantidad de provisiones para la alimentación de los niños y hay muchos atrasos con el pago de las educadoras. En un hogar que hay 120 niños y niñas, cómo va a ser posible que manden un quintal de arroz para todo un mes”, detalló la fuente.
Sin embargo, el Gobierno orteguista ha mantenido una política de reducción de asignaciones que toma su cariz más drástico con la suspensión de las subvenciones a los albergues.
“Del 2005 al 2009 la asignación a servicios asistenciales y protección social en Mifamilia ha disminuido considerablemente. En el 2005, el presupuesto de esta institución representó el 44.3 por ciento del presupuesto total destinado a servicios asistenciales y protección social, y entre el 2007 y 2009 ha representado apenas el 15 por ciento”, sostuvo Marvin García, analista del IEEPP.
Añadió que “con el actual ritmo de reducciones presupuestarias anuales es claro que el Mifamilia no es concebido hoy en día como institución clave para ejecutar las políticas relativas a protección social y especial”.
Mientras esto ocurre, las calles de Managua siguen atestadas de niños pidiendo dinero.