El dirigente sindical sandinista Roberto González aseguró que su colega Gustavo Porras, también sandinista, no representa a los miles de trabajadores afiliados a la Central Sandinista de Trabajadores (CST), y que al diputado Wálmaro Gutiérrez y al Ministro de Hacienda, Alberto Guevara, se les pasó la mano al excluir a la CST de “las supuestas negociaciones” sobre la reforma fiscal aprobada ayer.
En el Frente Sandinista (FSLN), el partido gobernante, a Porras se le considera “el bendecido” de la primera dama Rosario Murillo; y él, además de diputado, dirige el Frente Nacional de los Trabajadores (FNT).
- El sindicalista Roberto González aseguró que la Central Sandinista de Trabajadores (CST) seguirá respaldando todos los esfuerzos del Gobierno “que sean correctos y para beneficio del pueblo y los trabajadores”.
Opinó que la reforma fiscal aprobada ayer no resuelve el problema de la evasión fiscal, y criticó que los funcionarios “se hagan los locos” con el tema de las exoneraciones y exenciones que otorgan a “sectores ociosos y oportunistas en la economía”, en vez de ir directamente a la producción.
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Sólo Porras fue incluido en las negociaciones de la reforma tributaria, manejadas por el diputado sandinista Gutiérrez, presidente de la comisión económica del parlamento, y el ministro Guevara, denunció González ayer.
González, quien se resiste a reconocer que Porras lo ha desplazado de la dirigencia sindical del FSLN que mantuvo por más de una década, dijo a LA PRENSA que no le importa que lo excluyan, porque seguirá luchando “desde abajo”.
Afirmó que, por presiones de la empresa privada y del Fondo Monetario Internacional (FMI), el gobierno de su partido, encabezado por Daniel Ortega, aprobó una reforma “insuficiente” y sacrificó la propuesta de los trabajadores de subir la base del impuesto sobre la renta (IR) a 100 mil córdobas, sin consultar a los sectores afectados.
“Una vez más sentimos a los empresarios saliéndose con la suya”, enfatizó González.
De la misma manera lamentó que se haya dado un “supuesto encuentro” entre el diputado sandinista Wálmaro Gutiérrez y el ministro Alberto Guevara, “para discutir el tema” y que en representación de los trabajadores nicaragüenses sólo haya participado Gustavo Porras y su grupo de dirigentes.
“Yo no tengo ningún problema en que Gustavo Porras exprese lo que tenga a bien en nombre de los trabajadores a los que él representa, pero Gustavo Porras no nos representa a nosotros los trabajadores afiliados a la Central Sandinista de Trabajadores. Y yo creo que igual derecho tenemos también para haber sido tomados en cuenta, para que estas cosas que estamos señalando hubieran sido tomadas en cuenta”, alegó González.
El sindicalista asegura que la decisión de “excluirlos”, a los de la CST, no fue una orientación del presidente Daniel Ortega, a quien le atribuyó la capacidad de “escuchar y tomar en cuenta las aportaciones” que se le ofrecen.
“Creo que en esta ocasión se le pasó la mano al presidente de la comisión económica (Wálmaro Gutiérrez) y al ministro Guevara. Y que no se me hagan los tontos con relación a este señalamiento, cuando ellos saben perfectamente quién es Roberto González y quién es la CST”, señaló González.
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