Por primera vez en muchos años el 7 de diciembre, día en que se celebra la tradicional Gritería en honor a la Purísima Concepción de María, transcurrió en “relativa” calma al punto que el hospital Fernando Vélez Paiz, de Managua, centro de referencia nacional para atención de los niños quemados, hasta ayer no reportaba ningún ingreso por esta causa.
Las instituciones como los Bomberos y Cruz Roja Nicaragüense tampoco reportaron mayores incidentes durante ese día.
Contrario al año pasado cuando las autoridades sanitarias reportaron cinco ingresos por quemaduras, de los cuales dos eran adultos y tres niños, este año según el informe del hospital Fernando Vélez Paiz no hubo ingresos de niños quemados por manipulación de pólvora.
El subdirector de ese centro asistencial, doctor Noel Larios, informó que sólo dos niños fueron atendidos la noche del 7 de diciembre en la Sala de Emergencias, pero no fue necesario internarlos.
Las quemaduras que ambos menores presentaban eran en los brazos y se diagnosticaron como leves, razón por la que recibieron tratamiento ambulatorio.
- Un niño de 10 años y originario de Bluefields, en la Región Autónoma del Atlántico Sur (RAAS), resultó con quemaduras la tarde del 7 de diciembre, durante la celebración de la Purísima Concepción de María, en esta ciudad.
Yo les quiero decir (a las otras madres) que no permitan que sus hijos anden donde haya pólvora, porque ya que a mi hijo le pasó esto, que no le suceda la misma desgracia a otros, dijo Espinoza.
El niño resultó con quemaduras de segundo grado, en el tórax y su brazo izquierdo. El afectado se encuentra en su casa de habitación debido a que las autoridades hospitalarias no pudieron operarlo, porque el quirófano está contaminado.
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El lunes sólo un niño ingresó al Vélez Paiz por quemaduras, sin embargo, ésta no fue provocada por pólvora. Según el doctor Larios, al niño le cayó agua hirviendo afectando el once por ciento de su espalda. Fue una quemadura de segundo grado, por lo que fue hospitalizado y aún no se sabe cuándo saldrá de alta. El niño tiene tres años y fue trasladado desde Nagarote, municipio del departamento de León.
BASTANTE CALMO
La Cruz Roja Nicaragüense por su parte informó que el 7 de diciembre sólo dieron asistencia a una persona quemada, en el sector del centro comercial Plaza Inter. El afectado fue un adulto que no ameritó llevarlo a un hospital, indicó Marcos Cortez, oficial del Centro de Operaciones de Emergencia.
Esta institución de socorro reportó cuatro heridos con armas cortopunzantes, uno por arma de fuego, 37 niños extraviados —la mayoría en Plaza La Fe—, once traslados a hospitales, entre otros. En total fueron 115 los servicios prestados el pasado lunes. “En comparación a otros años hubo un descenso en los servicios prestados, en años anteriores se han disparado los casos, este año por ejemplo reportamos sólo un accidente de tránsito”, explicó Cortez.
El Benemérito Cuerpo de Bomberos, a través del teniente Juan Carlos Carrión, informó que “ni en Managua ni en otros departamentos” se dio asistencia a quemados. “Todo transcurrió en relativa calma, hubo sus atenciones, pero nada relevante”, dijo.
FACTORES QUE INFLUYEN
¿Pero a qué atribuyen un 7 de diciembre tranquilo y sin muchos accidentes? Para los entrevistados las causas se resumen en: mayor conciencia de la población en cuidar a los niños, la crisis económica que no permitió los acostumbrados paseos de los pobladores y la compra en exceso de pólvora y un destacado trabajo de la Policía Nacional.
“Los adultos al parecer hicieron caso de cuidar a los niños”, expresó el doctor Noel Larios, quien resaltó la labor de los medios de comunicación en difundir los mensajes educativos.
Mientras que el teniente Juan Carlos Carrión indicó que la Policía Nacional nos “está ayudando para que no se le venda pólvora a los niños y a personas ebrias”.
Para Rolando Maltez, uno de los vendedores de juegos pirotécnicos ubicados en el parque Fray Bartolomé de las Casas de la capital, el asunto quizá se relacione a una disminución en la compra de pólvora.
El vendedor, quien asegura haber invertido más de 40 mil córdobas en su negocio, dijo que las ventas estuvieron bajas y en Managua “casi ni se escucharon explosiones de pólvora, esperamos que para Navidad vendamos más”.
LA PRENSA llamó a la titular del Silais-Managua, doctora Maritza Cuan, para conocer el reporte de incidentes del 7 de diciembre y aunque en un inicio pidió tiempo para recabar la información, después nunca volvió a contestar las llamadas. De forma extraoficial se conoció que los hospitales como el Roberto Calderón, Alemán Nicaragüense y Lenín Fonseca no reportaron ingreso de personas quemadas por pólvora.
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