CORRESPONSAL/ RIVAS
Un proyecto que pretende ser guía para otros municipios de Nicaragua en la protección de los recursos hídricos se implementará en los próximos tres años en la subcuenca del río Gil González, el cual desemboca en el Lago Cocibolca y abarca los municipios de Belén, Potosí y Buenos Aires.
En un encuentro entre los alcaldes de estos tres municipios rivenses, con la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Sostenible (Fundenic) y el Centro de Investigaciones de Recursos Acuáticos (CIRA), se informó que el proyecto cuenta con el financiamiento de la Unión Europea, con un monto de 330 mil euros.
Según el doctor Jaime Incer Barquero, presidente de Fundenic, el objetivo principal es garantizar la calidad del agua del Lago Cocibolca, “que es el que calmará la sed de los rivenses y de los habitantes de los departamentos que limitan con el Gran Lago de Nicaragua”.
Para lograr ese objetivo el proyecto hará un estudio de cuántas fincas hay a lo largo de los 42 kilómetros de extensión del río Gil González.
Incer indicó que la calidad del agua del Cocibolca se ha ido perdiendo debido a la contaminación de la agricultura, “y el proyecto pretende mejorar la situación de los terrenos aledaños, evitando las erosiones, parar la contaminación del río con el uso de agroquímicos en el cultivo de caña de azúcar, arroz y plátano, y evitar que el río se seque”.
Salvador Montenegro Guillén, director del CIRA, de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua), dijo que es la primera vez que varios gobiernos locales en conjunto con la universidad y sociedad civil trabajarán en pro de garantizar el recurso hídrico para las nuevas generaciones.
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