BRUSELAS/AFP
Un grupo de militantes de Greenpeace logró este jueves burlar las medidas draconianas de seguridad de una cumbre de la UE en Bruselas, al acceder a la entrada por donde llegan los jefes de Estado y de gobierno y desplegar pancartas que exhortaban a Europa a “salvar Copenhague”.
Los activistas de la organización ecologista se bajaron de una camioneta justo delante de la entrada del Consejo Europeo, a la misma hora a la que empezaban a llegar los líderes de los 27. Para acceder al lugar, hicieron el mismo recorrido que los autos oficiales.
“¡Despierten, despierten!”, corearon, antes de ser rápidamente reducidos por los agentes de seguridad.
Los líderes de la UE se aprestan a aprobar, en su cumbre que se abría este jueves, un plan de ayuda inmediata a los países pobres para combatir el cambio climático con la esperanza de impulsar las negociaciones internacionales en Copenhague.
De la misma forma, examinarán la posibilidad de elevar su objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, del 20 al 30% en 2020 con respecto a los niveles de 1990.