La educación es un derecho pendiente en Nicaragua. A 61 años de haberse aprobado la Convención de Derechos Humanos, Luisa Molina, vocera de la Coordinadora Civil, señaló que el Gobierno no ve la educación como una prioridad en la que se requiere invertir.
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“Podemos plantear que la educación vista como un derecho fundamental para las niñas, niños y adolescentes es un derecho pendiente en Nicaragua, un derecho que en las últimas cuatro décadas no ha sido prioridad para nuestro paÃsâ€, indicó Molina.
Organismos de la sociedad civil han señalado que en Nicaragua se requiere invertir, por lo menos, el siete por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en educación.
“Hemos hecho proyecciones de que al 2015 Nicaragua va a ser uno de los paÃses que no podrá alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio si no se mantiene cierto nivel de inversión pública para ejecutar planes de salud y educación. Nicaragua tiene muchas posibilidades de alcanzar las metas de género, pero en temas de salud, educación y lucha contra la reducción de la pobreza es posible que no lleguemos a alcanzar las metasâ€, apuntó Humberto Meza, oficial de Campañas de Oxfam Internacional.
La profesora Elba Rivera afirmó que en la zona rural del paÃs la falta de inversión se siente más fuerte. “En las zonas rurales hay demasiada pobreza, faltan maestros porque hay quienes tienen entre 60 y 70 alumnos, hay mucho multigrado y un maestro da hasta seis grados, por eso se siente más. Los maestros tenemos un programa para ejecutar, desde el Ministerio de Educación, muy ambicioso en comparación con la realidad que vivimos en el campoâ€, dijo Rivera.
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