CORRESPONSAL/ MASAYA
Sesenta y cuatro operadores que laboran en los pozos de Enacal-Masaya intentaron tomarse la delegación en protesta por haber sido enviados a sus casas a cumplir treinta días de vacaciones, cuando la ley establece las vacaciones de quince días cada seis meses, explicó el secretario general de la Federación Alba Solidaria de Enacal, Paulino Mayorga.
Mayorga, quien dijo representar a los trabajadores de la Central Sandinista de Trabajadores, dijo que con esto se está violentando las leyes laborales y el mismo convenio que los trabajadores firmaron y, pese a que han solicitado tres inspecciones de parte del Ministerio del Trabajo, el delegado de Enacal Atel Pacheco no ha dado la cara para aclarar ese asunto, “pero sí ha coaccionado e intimidado a los trabajadores, al punto que nos quiso cerrar las puertas de la delegación”.
Los trabajadores pretendían cerrar las puertas de la delegación y fueron impedidos por el mismo delegado Atel Pacheco, quien quiso abrir las puertas para atender al público y en su intento fue agredido y empujado hacia atrás, recibiendo golpes en la espalda, por lo que tuvo que llamar a la Policía para poner el orden.
NO HAY DESPIDOS
“Ellos están inconformes porque temen ser despedidos, pero aquí a nadie se está despidiendo porque después de sus 30 días de vacaciones van a laborar, pero en otras condiciones, sin trabajar horas extras, sin alimentación y trabajando ocho horas reglamentarias, en vez de doce horas, porque el cansancio de los trabajadores con largas jornadas de trabajo viene a afectar a la misma empresa, se nos han quemado bombas y hemos sufrido desperfectos de maquinarias y no queremos eso”, dijo Pacheco.
Los trabajadores reafirmaron que continuarán luchando para que se les respete los convenios que han sido firmados y manifestaron que desconocerán todo lo actuado por esta administración, al tiempo que hicieron un llamado a la presidente ejecutiva de Enacal, Ruth Selma Herrera, para cumplir con los beneficios del convenio colectivo y que reflexione sobre la situación, porque de ella dependerá la actuación de los trabajadores.
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