Por Ronny Rojas
Tomado de lanacion.com
El embajador de Nicaragua, Harold Rivas, pidió al Gobierno costarricense utilizar la Policía y las autoridades judiciales para evitarle “el acoso” de La Nación. Rivas así lo solicitó, en una nota que le envió al director de Protocolo de la Cancillería, Javier Sancho, un día antes de que este medio publicase que la familia de su hermano, el magistrado Roberto Rivas, utiliza en Costa Rica, de forma indebida, carros diplomáticos exonerados.
Según el embajador, este diario violó su “derecho a la privacidad”.
“Rogamos que por su digno medio se haga lo que esté a su alcance ante las autoridades de seguridad y judiciales de la República de Costa Rica a fin de que cese el acoso y la persecusión del diario La Nación ”, indicó la misiva firmada por el embajador nicaragüense.
Ante tal solicitud, la Cancillería le reprochó a Rivas sus “preocupantes” argumentos “ para intentar silenciar a un medio de comunicación nacional”, según consta en una nota oficial del 4 de diciembre.
El Gobierno costarricense también le indicó al embajador que no existen pruebas fehacientes de que se estuviera produciendo el acoso del cual se considera víctima.
Protesta
En otra nota enviada a la cancillería el 25 de noviembre, el embajador Rivas protestó porque este diario publicó que dos hijos del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, viven en una de las casas que el jerarca del Consejo Supremo Electoral (CSE) de ese país, Roberto Rivas, posee en Costa Rica.
Se trata de Maurice y Laureano Ortega Murillo, quienes estudian en la Universidad Véritas.
Rivas también se quejó de la Dirección de Migración por dar información sobre los movimientos migratorios de los hijos de Ortega.
Sobre esto, la Cancillería le aclaró al embajador de Nicaragua que en Costa Rica este tipo de información “es de orden público y de libre acceso para cualquier ciudadano (…) como corresponde a la democracia más antigua del continente, y donde el ejercicio de las libertades, incluida la libertad de expresión, es una práctica cotidiana”.
Discreción
El embajador nicaragüense también le sugirió al Gobierno de Costa Rica mantener a los medios de comunicación al margen de todo asunto oficial entre ambos países y le pidió discutirlos “por las vías oficiales directas”.
No obstante, la Dirección de Protocolo de la Cancillería le explicó a Harold Rivas que Costa Rica es “un Estado de Derecho en el que la libertad de expresión e información está plenamente garantizada en la Constitución Política”.