RIO DE JANEIRO/AFP
El niño brasileño de dos años al que le introdujeron una treintena de agujas en el cuerpo en un ritual de magia negra será operado esta tarde para retirarle las más próximas al corazón y pulmón, informó a la AFP una portavoz del hospital.
Luego de realizarle un ecocardiograma y tomografías de tórax, abdomen y columna, los médicos resolvieron que el pequeño será sometido en principio a tres cirugías en el hospital de Salvador de Bahia (nordeste) en el que se encuentra internado en estado grave, aunque estable.
En la primera operación, este viernes, se le retirarán los objetos que ponen en mayor riesgo su vida: tres agujas próximas al corazón y otra cercana al pulmón, señaló la portavoz.
En una segunda intervención se retirarán las agujas alojadas en su abdomen, y en la tercera aquellas en la columna. Estas dos operaciones no tienen plazo de realización ya que dependen de la evolución del pequeño.
La portavoz también especificó que se identificaron alrededor de unas 30 agujas en el niño, siendo que en un principio se había informado de 50. Los elementos se encuentran alojados en su tórax, abdomen, cuello y piernas, luego que aparentemente su padrastro lo sometiera a rituales de magia negra.
Como “varios órganos pueden haber sido alcanzados, puede ocurrir algún proceso infeccioso. Y los propios procedimientos, que son delicados, pueden acarrear un riesgo de muerte”, declaró a la prensa el médico Francisco Reis, director del Hospital Ana Nery de Salvador.
El padrastro del niño, Roberto Carlos Magalhaes, su amante, y otra mujer fueron detenidos el jueves, acusados de haber introducido las agujas en el cuerpo del pequeño durante rituales de magia negra.
Magalhaes declaró a la policía de la localidad de Ibotirama (estado de Bahia), donde viven, que se estaba vengando de su esposa, ya que discutían mucho.
La madre del pequeño, Maria Souza Santos, de 38 años, vive con sus seis hijos, su madre y su nuevo marido.