CORRESPONSAL/ RIVAS
Once vendedores de pólvora, ubicados en la conocida Calle del Amor, salida a Tola, Rivas, coincidieron en que las ventas en la época de la Purísima y de Navidad han sido las más bajas desde que se dedican a esta actividad desde hace unos diez años.
Los comerciantes comentaron a LA PRENSA que en este año les ha tocado muy duro, puesto que hasta los impuestos para vender el producto subieron al doble.
[/doap_box]
“Ahora tenemos que pagar seis mil córdobas por el derecho de estar en esta orilla de la calle y antes sólo pagábamos tres mil, a la Alcaldía de Rivas también hay que pagar solvencia municipal, sacar récord judicial, récord policial, pagar mil córdobas en la renta, sacar solvencia fiscal y lo nuevo que nos pidieron este año era que teníamos que traer una constancia psicológica para que nos extendieran el permiso de vender pólvora en este local”, indicó uno de los vendedores.
Sara María Marín, una de las vendedoras, recordó que hace unos años eran unos catorce vendedores, el año pasado estuvieron doce y este año el grupo se redujo a once.
Con esperanzas que situación mejore
“La esperanza que tenemos es vender bastante este 31 de diciembre para poder salir con los gastos y pagar los préstamos que hacemos para trabajar con pólvora”, detalló.
Ileana Avellán, otra vendedora, dijo que para poner a funcionar el negocio tienen que invertir hasta tres mil dólares y estar pendientes de volver a comprar más productos según como estén las ventas, pero aseguró que en este año las ventas han estado tan malas que sólo una vez ha ido a reabastecerse de estos productos.
Según los vendedores de pólvora, ahora tienen que pagar un permiso en la Policía cada vez que quieran reabastecerse del producto y antes bastaba con pagar el permiso.
Ver en la versión impresa las páginas: 7 B