Faltando sólo los datos de diciembre en las estadísticas del Banco Central de Nicaragua (BCN), las remesas continúan en “números rojos” y sin señales de pronta recuperación, lo cual interrumpiría el crecimiento continuo que ese sector ha tenido en los últimos años.
El BCN reporta en su portal web los datos de las remesas desde el año 2000, cuando según esa entidad se percibieron unos 320 millones de dólares bajo ese concepto. En el 2008 ese número había ascendido a 818.1 millones de dólares.
Hasta noviembre pasado al país habían ingresado bajo ese término unos 699.3 millones de dólares (unos 14 mil 685 millones de córdobas), 118.8 millones de dólares menos de lo que se percibió el año pasado.
Todo apunta a que el continuo crecimiento del sector se verá interrumpido, pues difícilmente en diciembre se percibirían esos 118.8 millones de dólares, pues el promedio de remesas en diciembre durante los últimos años ha sido de unos 70 millones de dólares.
Al comparar noviembre de 2009 con el mismo mes de 2008, se deduce que el país no percibió este año alrededor de 46 millones de dólares vía remesas familiares.
Economistas han estimado que la caída en las remesas continuará percibiéndose al menos hasta finales de este año, debido a la alta tasa de desempleo en Estados Unidos, el principal país emisor de las remesas que llegan a Nicaragua.
Hasta octubre el número de desempleados en Estados Unidos llegó a unos 15 millones de personas en octubre pasado, siendo los inmigrantes latinoamericanos uno de los grupos más afectados.
La tasa de desempleo entre los latinos que viven en ese país pasó del 12.7 por ciento en septiembre, a 13.1 por ciento en octubre.
La persistente caída en las remesas familiares sustenta los resultados de una encuesta que realizó la firma M&R Consultores entre marzo y abril pasados, en la cual cerca de la mitad de los encuestados que dijeron recibir remesas (45.4 por ciento) aseguró que reciben menos envíos desde el exterior que el año pasado.
La encuesta de M&R reveló en ese entonces que esa situación se agravaba en el área rural, donde el 51.1 por ciento de los consultados que reciben remesas aseguró que el monto percibido ahora es menor que el del año pasado.
Agosto y septiembre fueron los meses más golpeados por la caída de las remesas. Hasta julio pasado, el BCN reportaba una reducción de 23.4 millones de dólares (más de 475 millones de córdobas) en el flujo de remesas familiares.
La caída mensual de las remesas este año ha sido entre dos y seis millones de dólares por mes, pero en agosto la caída fue de 9.2 millones de dólares, en comparación con agosto del 2008, y en septiembre fue de 8.6 millones de dólares.
Según han reportado este año las cámaras de Comercio y de Industria de Nicaragua, la caída en el ingreso de las remesas familiares ha sido una de las razones por las que se han reducido las ventas en esos sectores, entre un 10 y 15 por ciento, debido a la afectación en la capacidad de consumo de quienes reciben dinero del exterior.
La caída en las remesas también afecta al sector construcción y financiero, dado que muchos nicaragüenses que viven en el exterior enviaban remesas para construcción de viviendas, o para pagar deudas de sus familiares en el país.
CAEN REMESAS DESDE COSTA RICA
Según confirmó recientemente el Banco Central de Costa Rica, las remesas hacia Nicaragua se han disminuido este año en unos 7.7 millones de dólares (unos 161.7 millones de córdobas), en comparación con el 2008.
En los primeros nueve meses del 2008, los nicaragüenses radicados en Costa Rica enviaron a sus familiares 128 millones 981 mil 505 dólares.
En cambio, durante los primeros nueve meses de este año, las remesas desde el vecino país del sur sólo alcanzaron los 121 millones 277 mil 265 dólares.
Según han estimado expertos, al igual que en Estados Unidos, la principal razón de la caída de las remesas enviadas desde Costa Rica es el desempleo.
Sólo el sector construcción, que emplea en su gran mayoría mano de obra nicaragüense, decreció este año un 40 por ciento, según la Cámara Costarricense de la Construcción.
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