Las nuevas restricciones establecidas en Estados Unidos, a vuelos procedentes de catorce países, podrían afectar de manera especial a viajeros de Nicaragua debido a la “amistad” del presidente Daniel Ortega con algunos gobiernos, como los de Irán, Libia o Cuba, que están en la lista.
El general retirado Hugo Torres considera que esa posibilidad está latente, ya que es posible que ciudadanos de esos y otros países triangulen sus viajes a través de Nicaragua. “Nicaragua es soberana para tener relaciones con quien lo desee, pero políticamente hay relaciones que tienen ribetes de peligrosidad” y podría ser el caso de Irán y Libia.
“Es por eso que no conviene cultivar mucho esas amistades, aunque se tengan relaciones con los países”, porque la primera obligación del Gobierno es velar por los intereses de la sociedad que representa, comentó Torres.
“Desafortunadamente a Ortega le vale un pito la seguridad de los nicaragüenses y hasta de su propio partido, con tal de tener protagonismo internacional y prefiere pagar ese precio”, afirmó el ex militar.
Gonzalo Carrión, abogado del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), dijo que el tema seguirá siendo complejo, porque Estados Unidos tiene derecho de velar por su seguridad, pero muchas de esas medidas violan derechos de los viajeros y para colmo muchas veces no son efectivas.
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