CORRESPONSAL/MATAGALPA
Las excusas han sido diversas y por quinta vez fue reprogramado el juicio en contra de dos personas, presuntamente implicadas en el asesinato de Juan Dionisio Sánchez Espinoza, de 61 años, ocurrido en el municipio matagalpino de Río Blanco.
Doris Portillo Howkins, de 52 años y esposa de Sánchez, fue acusada y detenida como presunta autora intelectual del asesinato que, la noche del 19 de septiembre del año pasado, supuestamente materializó Donald Castro Polanco, de 33 años.
El proceso penal nació con la audiencia preliminar el 25 de septiembre del año pasado y después de la audiencia inicial el juicio fue programado para el 27 de noviembre de 2009, sin embargo, en esa ocasión uno de los defensores pidió la reprogramación porque debía estar en otro proceso.
Las otras prórrogas fueron el 10 de diciembre porque no llegaron todos los testigos; el 18 del mismo mes porque tanto el fiscal como el juez tenían reuniones en Managua; el 22 de diciembre porque el fiscal se enfermó.
La quinta vez, este martes, la reprogramación del juicio fue porque, además de que no llegaron algunos testigos propuestos por la Fiscalía, el abogado Denis Rodríguez Mendoza, defensor de Castro Polanco, solicitó una prórroga para “demostrar que cumplió con la obligación procesal de hacer su intercambio de información y pruebas”.
Por eso, el titular del Juzgado Segundo de Distrito Penal de Juicios de Matagalpa, Juan Francisco Vega Reyes, reprogramó la audiencia de juicio para el 5 de febrero próximo.
Portillo Hawkins cumplió durante tres meses con la medida cautelar de prisión preventiva y, por los aplazamientos en la fecha de juicio, el juez Vega tuvo que ordenar la libertad de la procesada.
Sin embargo, Vega impuso otras medidas cautelares a Portillo, incluyendo la presentación periódica al Juzgado y las prohibiciones de ir a Río Blanco y salir del país.
Mientras tanto, Castro Polanco sigue preso porque el nuevo atraso fue atribuido a su defensor.
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