Los salineros criollos de El Tamarindo hicieron pública una denuncia en contra de la Alcaldía de La Paz Centro y de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (Enacal) de la misma ciudad, porque supuestamente podrían contaminar las aguas del río El Tamarindo, en el occidente del país.
Según Eddy Montes, líder de los salineros, el desaguadero de las pilas sépticas de la ciudad de La Paz Centro va a dar a un ojo de agua que es tributario de El Tamarindo. El temor de los salineros es que, cuando el sistema de drenaje de las pilas sépticas entre a funcionar, toda esa agua irá a parar a las salinas, a través del río, por lo que el 80 por ciento de los consumidores de sal en Nicaragua podrían tener problemas de salud.
Montes afirmó que la denuncia ya la pusieron en la delegación del Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales de León, pero que no recibió respuesta.
Róger Osorio, director administrativo de la Alcaldía de La Paz Centro, aseguró que el agua que saldrá de las pilas sépticas cuando el proyecto del drenaje esté culminado, será tratada y, por lo tanto, no significará ningún peligro para el cuerpo de agua, la flora, la fauna ni las personas.
Montes dijo que el problema está en que el diseño del drenaje no es el adecuado para que las aguas queden bien tratadas. Osorio, quien reconoció que las pilas fueron mal construidas hace casi diez años y que además están ubicadas en un sitio que atenta contra las reservas subterráneas de agua de La Paz Centro, dijo que aún con el diseño actual el drenaje está pensado para no causar daños a El Tamarindo. Enacal dio su versión en diciembre, aduciendo que las mismas no contaminarán el río.
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