SAN SALVADOR/AFP
Un fuerte y prolongado temblor de 6.0 grados en la escala de Richter y con epicentro en el Pacífico sacudió este lunes parte del territorio centroamericano, provocando alarma en Guatemala y El Salvador pero no víctimas, informaron los servicios geológicos y de socorro.
El movimiento telúrico que se registró a las 09H40 locales (15H40 GMT) tuvo su epicentro en la costa del Pacífico frente a Guatemala, dijo el Servicio Nacional de Estudios Territoriales (SNET) de El Salvador.
Con una profundidad focal de 48 km el sismo se debió al choque de las placas Cocos y Caribe en la zona de subducción del Pacífico.
El sismo estremeció los edificios de San Salvador y la capital de Guatemala provocando pánico, pero los organismos de socorro no reportaban víctimas ni daños.
Un portavoz del SNET indicó que “han sido varios los sismos los que se han registrado en el mar”.
Los cuerpos de socorro de Guatemala indicaron que el movimiento telúrico se sintió en la mayor parte del país, especialmente en el sur, este y oeste.
El sismo, que ocurrió a una profundidad de 103 km, fue localizado a 39 km al suroeste de la ciudad salvadoreña de Ahuachapán, en la costa del Pacífico, y a 53 km al sureste de la localidad guatemalteca de Cuilapa, explicó el Instituto Geológico estadounidense en un comunicado.
El experto Luis Arreola, del Instituto de Sismología de Guatemala, precisó que este movimiento telúrico es el de mayor magnitud que se ha registrado este año en el país.
“Hasta hoy llevamos 53 sismos registrados de los cuales siete han sido reportados como sensibles, incluido el de este lunes”, detalló.
Agregó que después del temblor de este lunes han “recibido reportes de toda la república de que fue sentido, pero sin causar daños ni víctimas”.
Los cuerpos del socorro también dijeron que el sismo sólo provocó alarma y llevó a cientos de personas a salir a las calles.
El sismo también fue registrado por el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, dijo la sismóloga Yanin Zamora, pero en Nicaragua no causó daños y mucha gente de Managua ni siquiera lo sintió.
