Mientras el economista René Vallecillo exigió ayer que la Contraloría General de la República (CRG) y la Asamblea Nacional investiguen si el ente de las telecomunicaciones, Telcor, hizo respetar la Constitución y la Ley 200 en la transacción del Canal 8, a la redacción de LA PRENSA llegó anoche una supuesta nota aclaratoria —sin firma ni sello— diciendo que Albanisa no compró la estación televisiva.
“En los registros jurídicos y contables de Alba de Nicaragua no existe ninguna operación de compra y venta del Canal 8”, destaca el supuesto comunicado.
VENTA SOSPECHOSA
En todo caso, la Constitución y la Ley 200 impiden que capital extranjero controle más del cincuenta por ciento de las acciones en los medios de comunicación.
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Vallecillo se declaró a favor de una investigación a fondo.
“Según entiendo, una empresa extranjera es la dueña de la mayoría de las acciones de Albanisa (del 51 por ciento) y el Estado de Nicaragua es el dueño del resto (49 por ciento). Por lo tanto se está transgrediendo la ley”, dijo el economista René Vallecillo al referirse a la compra-venta de Canal 8.
El artículo 29 de la Ley General de Telecomunicaciones y Servicios Postales (Ley 200) establece que “las licencias sólo se otorgarán a personas naturales o jurídicas nicaragüenses. En el caso de sociedades anónimas de capital social, deberá estar constituido por lo menos con el cincuenta y un por ciento de nacionales nicaragüenses”.
De acuerdo con Vallecillo, la Asamblea Nacional debería interpelar a Orlando Castillo, director de Telcor, para que explique el traspaso de la licencia de Canal 8.
En el caso de la CGR —indicó Vallecillo— está obligada a realizar una auditoría operativa en Telcor, para verificar si esa institución hizo respetar la Ley 200. En el pasado los contralores se han excusado de investigar denuncias en contra de Albanisa, aduciendo que es privada.
Jesús Miguel Blandón, presidente de la Unión Nicaragüense de Radiodifusores, consideró que sería lamentable que el capital extranjero controle a los medios de comunicación.
Blandón dijo que Arnoldo Ríos, Allan Téfel y Agustín Fuentes vendieron sus emisoras.
El empresario expresó su temor de que el espectro radioeléctrico termine en pocas manos.
Para Sofía Montenegro, periodista del Centro de Investigaciones de la Comunicación, está demostrado que Telcor en lugar de respetar la ley fue cómplice, partícipe y socio del negocio.
“Eso implica que hay una pérdida de soberanía, ellos (pareja presidencial) que son tan dados a defender la soberanía, en el control y en la voz y en la libertad de expresión de los nicaragüenses. Estamos confiscados por los dos lados. Por el lado de la familia presidencial y ahora por el Gobierno venezolano”, dijo.
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