MADRID/ CABLES COMBINADOS
- El canciller colombiano, Jaime Bermúdez, aseguró que se espera que el Gobierno de Venezuela dé una explicación satisfactoria a un juez español que pide información sobre la supuesta cooperación de las autoridades venezolanas para que ETA y las FARC pudieran establecer una alianza.
Bermúdez agregó que le pidió a los responsables de la embajada colombiana en España que, de ser posible, consigan el expediente que tiene del caso el juez español Eloy Velasco, de la Audiencia Nacional española.
El auto del juez Eloy Velasco señala que hay indicios de la cooperación de Venezuela con una presunta alianza establecida entre ETA y las FARC, que tenían como fin atentar en España contra altos cargos de Colombia, como el presidente Álvaro Uribe.
En un comunicado, el Gobierno venezolano rechazó la denuncia del juez español y dijo que estos señalamientos inaceptables son de naturaleza y motivación política.
El presidente Hugo Chávez calificó como rezagos de un pasado colonial esa denuncia del juez español, en declaraciones ofrecidas durante una visita a Montevideo, donde asistió a la investidura del presidente uruguayo, José Mujica.
[/doap_box]
El Partido Popular (PP), el principal de la oposición en España, cree que si se confirma que el Gobierno de Hugo Chávez apoyó a ETA, el Ejecutivo español debería convocar “inmediatamente” a su embajador y “plantearse seriamente romper relaciones” con Venezuela.
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, se expresó así sobre la acusación de la Audiencia Nacional de España de que el Gobierno de Caracas ayudó a que la banda terrorista ETA y la guerrilla colombiana de las FARC entablaran una alianza.
“Sería un tema gravísimo, de una dimensión absolutamente inalcanzable”, señaló la dirigente conservadora en declaraciones a la emisora española Punto Radio.
Tras asegurar que en las relaciones internacionales el Gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero “no ha dado su mejor talla” con “amistades” como las de Hugo Chávez, que “no son las que más benefician” a España, insistió en que “si esto se confirmara sería de una extrema gravedad”.
Además, el Partido Popular también quiere que el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, convoque al embajador de Venezuela en España para que pueda dar “explicaciones cumplidas” sobre la supuesta vinculación de este país con ETA.
Así, la portavoz del PP en el Congreso de los Diputados (la cámara baja del Parlamento español), Soraya Sáenz de Santamaría, anunció que solicitará la comparecencia “urgente” del ministro para que pueda informar de las medidas que va a adoptar el Gobierno ante los hechos denunciados por el juez Eloy Velasco.
Más allá de la comparecencia parlamentaria, el PP pretende que el Ejecutivo socialista se replantee su política en relación con Venezuela, un país al que dispensa a su entender un trato “excesivamente deferente” y con el que incluso mantiene una relación de “amistad”, según señaló Sáenz de Santamaría.
ESPERAN ACLARACIÓN
El Gobierno español dijo ayer que espera la cooperación de Venezuela para aclarar si el Gobierno de Hugo Chávez apoyó la colaboración entre ETA y la guerrilla colombiana de las FARC, y que actuará en función de las explicaciones.
El canciller Miguel Ángel Moratinos se comunicó telefónicamente con Chávez y su homólogo Nicolás Maduro y, de momento, evitó hablar de sanciones diplomáticas. Según Moratinos, ambos se comprometieron a esclarecer los hechos y rechazaron el contenido del auto judicial, que acusa al Gobierno venezolano de amparar la relación entre la organización separatista vasca y las FARC.
“AMISTAD PELIGROSA”
El líder del Partido Popular de España, Mauricio Rajoy, al referirse al caso presentado por el juez Velasco, afirmó que “las amistades peligrosas acaban generando muchos problemas”, sobre las relaciones bilaterales entre España y Venezuela.
Ver en la versión impresa las páginas: 8 A