Mientras avanzan las obras de sellado en el vertedero de Managua, la Administración municipal busca un nuevo sitio que deberá funcionar como futuro vertedero una vez que La Chureca haya sido sellada en su totalidad.
“Encontrar un nuevo vertedero es uno de los retos más importantes que aún estamos analizando. El nuevo vertedero debe tener una capacidad para recibir entre un cinco y ocho por ciento de lo que actualmente ingresa a diario como desecho en La Chureca (mil 200 toneladas)”, indicó el secretario general de la comuna capitalina, Fidel Moreno.
- Gabriel Martínez Páez, uno de los propietarios del área donde se ejecutará la millonaria inversión en el Distrito Dos, insistió ayer que la toma y modificación del terreno de La Chureca es ilegal.
El litigio por unas 146 manzanas de propiedad, que pertenecen a la familia Martínez y que es justamente donde se invertirá la cooperación española, empezó desde junio del 2009, cuando la Procuraduría de la República intervino y ejecutó una anómala expropiación del área.
El caso se mantiene en la Corte Suprema de Justicia, donde hay un recurso de lo contencioso administrativo.
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Moreno, luego de realizar un recorrido junto con técnicos de la comuna, de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y de la alcaldesa designada Daysi Torres, indicó que la planta procesadora para material inorgánico tratará un 40 por ciento de los residuos de la capital. Mientras, la planta para el material orgánico podría tener capacidad para darle atención a un poco más del cincuenta por ciento de los desechos que entran al vertedero municipal.
El restante de los desechos, que sería menos de un diez por ciento de la actual recolección, sería material inerte como tierra, arena y desperdicios de la construcción que no tienen ninguna utilidad.
“Ese material restante ya no tiene materia orgánica ni lixibiados (químicos contaminantes). Es un vertedero seco, ya no hay material reciclable ni orgánico y no tiene mayor valor”, agregó Moreno.
VERTEDERO PODRÍA QUEDAR CERCA DEL SELLADO
Hasta el momento, según confirmaron los técnicos de la AECID y la comuna capitalina, ya se sellaron unas veinte hectáreas del actual vertedero donde se niveló la basura que ahí había, se instaló tubería para la canalización de los gases, luego se selló con una capa de tierra de 50 centímetros, se colocó una geomembrana para que los gases no salgan, y luego otra capa de tierra encima.
Mientras se avanza en esa tarea, que se extenderá en unas 46 manzanas donde están los desechos de la capital desde hace unos cuarenta años, los ejecutores del millonario programa de desarrollo integral de Acahualinca analizan las opciones para el nuevo vertedero municipal.
Una de las propuestas radica en establecer el nuevo vertedero en la zona noroeste de toda el área de intervención. Sin embargo, aún no hay nada oficializado.
“El nuevo vertedero debe tener condiciones para operar por lo menos para los próximos 50 años, entonces debemos definir un nuevo vertedero que brinde las condiciones”, dijo Moreno, quien no profundizó sobre las varias opciones que se están barajando en el tema.
El programa de desarrollo integral para Acahualinca, que contempla el sellado de La Chureca, la instalación de un polígono industrial, la construcción de una urbanización con 258 viviendas y la habilitación de los 15 barrios en los que hasta se mejorarán seis escuelas, cuenta con un financiamiento de 30 millones de euros ya oficializados por la cooperación española.
No obstante, aún se requiere de otros siete millones de dólares para instalar una planta procesadora de material inorgánico.
Sobre el tema, Juan Manuel Mariscal indicó que “la dignidad de los pobladores, de los ciudadanos no tiene precio”, por lo que se mostró dispuesto a ampliar la cooperación española en la capital.
De acuerdo con el anuncio oficial de las entidades competentes, para marzo del 2011 se tendrían todas las obras contempladas ya finalizadas. No obstante, los técnicos están aplicando un retraso “razonable” de otros seis meses para la ejecución de todo lo programado.
Cabe señalar que el inicio del programa empezó desde el 2007, con la Administración del alcalde sandinista Dionisio Marenco.
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