CORRESPONSAL/ ESTELÍ
El Obispo de Estelí, monseñor Abelardo Mata, se pronunció a favor de que haya observación internacional en el proceso de elecciones primarias que harían los partidos de la oposición que buscan su unidad.
Monseñor Mata dijo que ese tema podría estar en la agenda de hoy, cuando se reanudan las pláticas entre el Partido Liberal Constitucionalista (PLC) y el Movimiento Vamos con Eduardo (MVE) y partidos aliados, que no se reúnen desde un impasse en las negociaciones, tras acusaciones mutuas luego de las elecciones regionales de la Costa Caribe, el mes pasado.
Mata recordó que el martes pasado las partes iban a reunirse y el encuentro no prosperó por razones aún no precisas. Pero se espera que hoy sí se reúnan.
Las elecciones primarias para escoger a un candidato único que compita con el Frente Sandinista en los comicios presidenciales del año 2012 también podría ser uno de los puntos de agenda en la próxima reunión.
“Se debe escuchar al pueblo sobre qué candidato quiere, porque aquí debe haber un solo candidato para no dividir el voto, a fin de que se logre de acuerdo a los programas y planes una visión de nación que deben presentarla los partidos para encontrar la mejor opción”, dijo Mata.
El Obispo dijo estar de acuerdo con que las elecciones primarias de la oposición sean observadas por organismos y árbitros internacionales con el fin de generar confianza.
“Sería excelente la observación internacional por la desconfianza que genera entre algunos que dicen si tal instituto lo hace es pariente de tal político, y claro que todas esas cosas son superables”, dijo el también vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua.
Políticos de otras tendencias han expresado su intención de participar en unas elecciones primarias de un eventual frente opositor amplio a Ortega, pero no en el proceso que promueve el PLC y que otras tendencias pretenden continuar.
El sábado el coordinador político del Movimiento Renovador Sandinista (MRS), Edmundo Jarquín, recordó que la división de los liberales y también la división del voto antipacto facilitó el triunfo de Ortega.
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