Certificar a las personas que ejercían algún oficio técnico de forma empírica es el propósito del proyecto de Formación Profesional Ocupacional e Inserción Laboral (FOIL).
Ayer cerca de 80 hombres y mujeres fueron certificados por el Instituto Nacional Tecnológico (Inatec) tras culminar los talleres de albañilería, armadores, auxiliar de albañil y soldadura.
Este proyecto es financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECI) y avalado por el Inatec.
Con este proyecto, que inició en el 2007, se ha capacitado a más de 500 hombres y mujeres, a través de becas educativas.
Según Silvia Grande, responsable de FOIL, además de la capacitación, la formación incluye la inserción en el mundo laboral. “Las capacitaciones iniciaron en el 2007, cuando llegamos a Managua y Rivas con el proyecto hicimos estudios de mercado para determinar en qué es útil realizar la capacitación para evitar que la misma no tenga un hueco en el mercado de trabajo”, dijo Grande.
La albañilería y la soldadura son oficios que en la mayoría de los casos se ejercen de manera empírica y Grande señaló que es necesario elevar el nivel de profesionalización de estas personas.
“Existe una demanda importante en el ramo de la construcción, porque existe en Nicaragua mucha gente que eran trabajadores empíricos y el problema es que no habían tenido acceso a certificar sus competencias laborales”, aseveró Grande.
Esta propuesta fue apoyada por el Inatec y el Ministerio del Trabajo (Mitrab).
DOS MUJERES ALBAÑILES
En esta graduación técnica fueron certificadas dos mujeres especialistas en el tema de construcción.
“No hay ninguna edad específica para poder ser uno de los beneficiados por el programa. Lo que sí se les exige es una prueba teórica objetiva y luego una prueba práctica, entonces estamos hablando de gente que tiene experiencia. En esta ocasión estamos certificando a dos mujeres en albañilería”, apuntó Grande.
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