Memoria
“Lo que ocurre en el pasado vuelve a ser vivido en la memoria”.
John Dewey (1859-1952 ), filósofo estadounidense.
CRISIS INSTITUCIONAL
La coyuntura política actual de la República de Nicaragua ha caído en otra de sus constantes crisis institucionales hasta tal punto que el Poder Judicial quiere alzarse como el poder supremo de la Nación. Esto por supuesto no tiene ningún asidero legal, ya que es el Poder Legislativo el que tiene el poder supremo y los restantes poderes están y deben estar subordinado a éste. El Poder Legislativo es el que tiene la facultad y la fuerza de la República para la preservación del bien común.
¿Por qué digo esto? Porque puede ser una tentación demasiado grande para la fragilidad humana propensa a empuñar el poder, el que las mismas personas que tienen la facultad de hacer leyes tengan también en sus manos el poder de ejecutarlas, con lo cual pueden eximirles por sí mismas de la obediencia de las leyes que dictan, y acomodar la ley, tanto en su elaboración como en la ejecución a su propia ventaja particular, y por ello venir a tener un interés distinto al del resto de la comunidad y contrario al fin de la sociedad y del Gobierno. Por tanto, en las repúblicas o forma de gobierno republicano bien ordenadas, donde el bien del conjunto es considerado como se debe, el Poder Legislativo es puesto en manos de diversas personas quienes, debidamente reunidas en Asamblea, tienen la facultad de hacer leyes.
El Poder Legislativo no es únicamente el poder supremo de la República, sino que es sagrado e inalterable en sus manos porque la comunidad ha colocado en sus manos la responsabilidad de hacer leyes. Tampoco un decreto, sentencia, edicto o poder que la respaldare, puede tener la fuerza y obligación de ley si no cuenta con su sanción por parte de ese legislativo que el público ha escogido y designado; porque sin esto la ley no podría tener lo que es absolutamente necesario para que sea una ley: el consentimiento de la sociedad sobre lo cual nadie puede tener poder para hacer leyes sino mediante el propio consentimiento de ella y por autoridad de ella. Y por tanto, toda la obediencia que por los más solemnes lazos alguien pueda estar obligado a prestar, finalmente termina en este poder supremo y está dirigida por las leyes que este último decreta. Tampoco pueden juramentar a ningún extranjero o poder subordinado doméstico, dispensar a ningún miembro de la sociedad de su obediencia al legislativo actuante de conformidad a la misión encomendada, ni obligarse a ninguna obediencia contraria a las leyes de tal manera decretadas, o más allá de lo que ellas consienten; siendo ridículo imaginar que uno no puede estar constreñido finalmente a obedecer a cualquier poder en la sociedad que no sea el supremo. A como los honorables magistrados doctor Rafael Solís y doctor Francisco Rosales en sus múltiples intervenciones televisivas han hecho hincapié que el único facultado para reformar nuestra Constitución es la honorable Asamblea Nacional.
Rafael Agustín Montes Valle
POLICÍA FLOJA Y BLANDENGUE
Solamente la ciudadanía consciente salva al pueblo de las garras y agresiones del dictador Daniel Ortega con su turba de delincuentes.
Es increíble cómo actúa la llamada Policía Nacional, de una manera floja y blandengue, que en sus propias narices los turberos tiran piedras, morteros y destruyen vehículos, sin ningún temor a ser apresados.
En las inmediaciones del parque de Altamira vi cómo una pandilla de turberos cruzaron en la calle un bus amarillo para que no hubiera acceso vehicular, mientras y tiraban morteros con una tranquilidad asombrosa, haciendo de las suyas como si no existieran autoridades.
Estos abusos y agresiones tienen que ser sancionados por la Policía de manera firme y responsable, como debe ser.
Espero que el próximo Gobierno, que vamos a elegir la mayoría de la ciudadanía nicaragüense, ponga en el lugar que corresponde a los delincuentes y turberos que hacen de las suyas, sin importarles agredir a civiles y ciudadanos respetuosos.
No entiendo por qué se compara al gobierno de Somoza con el gobierno sandinista, cuando con Somoza hubo prosperidad económica, manteniendo la moneda estable por mucho tiempo, y ubicando al país como el granero de Centroamérica, mientras que con los sandinistas éstos sólo han creado una exorbitante inestabilidad económica y desgracia a la Nación. Estos sandinistas también se han hecho millonarios de la noche a la mañana, por lo cual espero que enfrenten algún día la justicia verdadera.
Luis A. Salas
MENSAJE A MAGISTRADOS
Con respecto al Decreto presidencial 03-2010, que faculta a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia a extender sus períodos en sus respectivas magistraturas, simplemente es anticonstitucional y obedece a intereses políticos y partidarios del partido de gobierno.
Insto al doctor Rafael Solís y al doctor Armengol Cuadra a que obedezcan la Constitución Política y las leyes del país y no se presten a desafiar a todas luces lo que la Constitución establece tan clara y diáfanamente.
Acaten la Constitución Política y obedezcan la voluntad de Dios . También hagan, por favor, que la Asamblea Nacional (AN) y sus honorables diputados elijan a los nuevos funcionarios públicos que administrarán el Poder Judicial.
Yadid Ronier Matamoros Pineda
EN DEFENSA DE CARICATURA
He leído con sorpresa dos comentarios de funcionarias de ONG dedicadas a la defensa de las mujeres , criticando la caricatura de la portada de El Azote del 18 de abril corriente. Pienso que aunque no les guste a estas señoras o compañeras, ellas deben aceptar que la cruda realidad de Nicaragua está reflejada en esa caricatura. El presidente Daniel Ortega ha violado y viola cotidianamente la Constitución con el beneplácito de la primera comisionada Aminta Granera, el mayor general Julio César Avilés, magistrados y diputados orteguistas y diputados traidores como Mario Valle, Osorno, etc. Y con la complacencia de ciudadanos que lo apoyan o que no quieren meterse en política. Ésa es la realidad. La acusación de violador de Zoilamérica a Ortega está allí, por lo que Ortega encarna las dos imágenes que tanto repudiamos la mayoría de los nicaragüenses.
La genialidad del caricaturista Manuel Guillén muestra cómo Rafael Solís, el ex magistrado “turbero”, y Roberto Rivas, maniatan a una bella y joven mujer (porque nuestra Constitución es joven y bella), avasallan la Constitución y las leyes y las manipulan en beneficio del dictador Ortega.
Esa caricatura es un reflejo perfecto de la realidad y critica a los funcionarios públicos que son cómplices del dictador Ortega. Lamento que las señoras no encuentren el humor, cuando la imagen muestra el simpático contraste de la francachela del Jefe del Ejército, la Jefa de la Policía y otros funcionarios, mientras se viola la Constitución. Lamento que en vez de denunciar al dictador Ortega y su constante violación a la Constitución y a las leyes, a las señoras o compañeras les incomode que un artista refleje la triste realidad del país, burlándose de los principales actores.
Lamento que no apoyen la crítica a la denuncia de Zoilamérica, que esa caricatura también lleva implícita. Creo que ambas señoras o compañeras, quizás por complacer a sus donantes o empleadores, salen públicamente defendiendo supuestamente a las mujeres. ¿Cómo van las mujeres de este país a ser libres y respetadas cuando el Jefe de Estado viola la Constitución y las leyes? Quizás están viendo un árbol y no el bosque. Porque aquí mujeres y hombres vivimos en Nicaragua. Es una manipulación ideológica o una defensa solapada a Ortega o en el mejor de los casos ingenuidad de pretender asilar a las mujeres del contexto del país.
Mario Hurtado Jiménez
TEATRO NACIONAL
La dirección general del Teatro Nacional Rubén Darío debe de reservarse el derecho de admisión y no permitir la entrada al teatro a fotógrafos que lejos de realizar un trabajo profesional llegan con sus cámaras a interrumpir las presentaciones que se realizan en ese templo de la cultura.
El viernes 16 en la magistral presentación del Royal Russian Ballet, un fotógrafo, ubicado en el primer balcón al lado derecho, no permitió escuchar el excelente repertorio musical, ya que el sonido que emitía su cámara cada vez que toma sus fotos, en serie, impedía el poder escuchar las gratas melodías.
Se debe ser cuidadoso hasta en estos mínimos detalles para que una presentación artística se aprecie en su totalidad.
Julio León Báez
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