A eso de las 8:00 a.m. de ayer se presentó a la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) para entregarse de forma voluntaria ante las autoridades policiales la ex jefa de contabilidad de Alba de Nicaragua S.A. (Albanisa), Leyla González Cordero, según confirmó la jefa de Relaciones Públicas de la Policía, comisionada mayor Vilma Reyes.
De forma escueta la vocera policial manifestó que existía una orden de detención en contra de González Cordero, por lo que después que se presentó a las instalaciones de la DAJ fue puesta a la orden del juez.
González, quien estaba prófuga, es señalada de ser la principal autora del hurto agravado a Albanisa.
La acusación indica que González Cordero —quien era jefa de contabilidad— bajo el falso argumento de viáticos y gastos personales, emitió cheques por las cantidades de 256 mil 700 córdobas y 55 mil dólares, equivalentes a 1.4 millones de córdobas que fueron cobrados en el banco por Henry Ricardo Rodríguez Largaespada.
La procesada estuvo bajo prisión preventiva hasta que la Juez Sexto Distrito de lo Penal de Audiencia de Managua, Gertrudis Arias, le dio la libertad, situación que González aprovechó para escapar.
Por el hurto de los más de 1.4 millones de córdobas sólo Henry Ricardo Rodríguez Largaespada fue declarado culpable por un tribunal de jurado.
Rodríguez fue acusado como cómplice del hurto agravado debido a que éste dio a cambiar a un amigo el cheque de Albanisa número 1489, por US$$ 55 mil.
El mismo tribunal de jurado declaró no culpable a la otra acusada como cómplice, María Lisseth Gutiérrez Silva, quien fue señalada como la persona que recogió las firmas libradoras del otro cheque, el 3422, por 256 mil 700 córdobas.
Ambos cheques fraudulentos, según la acusación, fueron ordenados por González Cordero el pasado 19 de octubre. El cheque 3422 fue cambiado por Henry Castrillo el 20 de octubre, pero éste no fue acusado porque alegó que él era el encargado de cambiar los cheques en Albanisa y por tanto sólo estaba obedeciendo órdenes. Además que todo el dinero se lo entregó a González Cordero.
De acuerdo con la acusación, el cheque de 55 mil dólares González Cordero se lo dio a cambiar ese mismo día a Rodríguez Largaespada, quien invitó a almorzar a su amigo Elí Roque Rocha, a quien le dijo que le cambiara el cheque.
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