Carlos Mario Márquez
SAN SALVADOR/AFP
Las organizaciones laborales de El Salvador exigen con motivo del Día Internacional del Trabajo, que el presidente izquierdista Mauricio Funes concrete los cambios que prometió en la campaña, pese a las presiones de la derecha y de las empresas transnacionales.
El tema de que Funes cumpla con su promesa de generar trabajo digno, promover la justa distribución de la riqueza y evitar los abusos del mercado, entre otros puntos de su oferta electoral, se convierten en el tema central de todo el movimiento laboral para la manifestación del 1 de mayo.
“La manifestación será para demandar los cambios que el país necesita. A casi un año del nuevo gobierno de izquierda, seguimos atrapados en las nocivas políticas neoliberales”, declaró a la AFP el secretario general de la Asociación de Empleados Públicos y Municipales, William Huezo.
Para el dirigente sindical, Funes, distanciado del partido de la ex guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda) que lo llevó al poder, ha sido presionado por la derecha y las transnacionales para no dar los pasos que prometió.
Huezo recordó que Funes fue “presionado” por las transnacionales para no sancionar un decreto legislativo que eliminaba el cargo fijo en la factura telefónica.
“Las políticas neoliberales se mantienen y eso impide mejorar la calidad de vida de los trabajadores. Se necesita que el presidente resista las presiones del poder económico”, subrayó.
En tanto, la Confederación Sindical de Trabajadores Salvadoreños y otras ocho organizaciones laborales invitaron conjuntamente este jueves a los trabajadores a participar en la marcha del Día del Trabajo tras señalar que “el pueblo logró la victoria (electoral de 2009), exigimos los cambios”.
Bajo la consigna “la fuerza del cambio es la acción, movilización y organización popular”, la marcha saldrá de la plaza El Salvador del Mundo, en el oeste capitalino, y cerrará en la céntrica plaza Gerardo Barrios.
“Exigimos al presidente (…) Mauricio Funes, que dé cumplimiento a los compromisos en su programa de gobierno adquiridos con este movimiento sindical y popular, y por el cual el pueblo lo eligió. Y le reiteramos que seremos vigilantes del efectivo cumplimiento de los mismos”, consignaron estos grupos en un comunicado.
Las organizaciones opinaron que con el triunfo de Funes se presentó un oportunidad para profundizar la democracia y generar una mejor distribución de la riqueza, superar la exclusión social, la corrupción y el “debilitamiento” de los derechos económicos, sociales y democráticos causados por el modelo liberal que impuso la derecha que gobernó entre 1989 y 2009.
El Salvador, de escasos 20.742 km2, tiene una pobreza que ronda al 35% de los 6,1 millones de habitantes.