CORRESPONSAL/ RIVAS
Cuatro mil dólares, ciento 70 mil colones costarricenses, seis mil 500 córdobas en efectivo y prendas de oro fue parte del botín que se llevaron tres asaltantes que llegaron armados con pistolas y un machete a la casa de Elizabeth Patricia Solís Pastrana, en Popoyuapa.
- Los sujetos que asaltaron a Balmaceda andaban en una camioneta Four Runner y se le atravesaron, obligándole a detenerse.
Como si sabían, me abrieron la cajuela de mi carro y sacaron un bolso donde guardaba 200 mil córdobas, comentó. El asalto ocurrió antes de las 5 de la tarde del último martes de febrero, sobre la carretera al santuario de Popoyuapa.
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Solís Pastrana dijo a la Policía rivenses que a las 07:30 p.m. del pasado domingo estaba en su casa acompañada de sus tres hijas, cuando llegaron los tres delincuentes portando armas de fuego y machete y las intimidaron, según precisó la inspectora policial Sonia Leal.
Leal detalló que a las mujeres las estaban intimidando cuando se apareció el yerno de la denunciante, Byron Balmaceda, el cual fue reducido por uno de los antisociales, lo introdujeron a la casa y le preguntaban dónde estaba el dinero.
Acto seguido los ladrones registraron el ropero y otros sitios de la casa hasta que encontraron el dinero que Solís Pastrana ocupaba para sus labores de cambio de divisas en la frontera de Peñas Blancas.
Aparte de robarse el dinero que encontraron, los tres sujetos arrasaron con un anillo de graduación, un anillo de matrimonio y una cadena de oro de las cuales la denunciante no precisó el monto a la Policía.
Hasta la tarde de ayer, la Policía continuaba investigando el asalto y no había sido capturado ningún sospechoso.
EN LA MIRA
Éste es el segundo asalto que sufren los cambistas de Rivas en lo que va del presente año.
A finales de febrero, el cambista Ramiro Balmaceda fue asaltado cuando se dirigía a su casa de habitación a bordo de su taxi y los delincuentes lo siguieron en una camioneta, se la atravesaron en el camino cerca de su vivienda y le robaron 200 mil córdobas y dos mil dólares.
Este cambista habita en un barrio vecino a Popoyuapa a unos 800 metros de la casa de la señora Solís. Esa vez detalló que ha sido asaltado en tres ocasiones y sólo en un caso la Policía logró esclarecer el robo y recuperar el dinero.
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