SAN JOSÉ/ACAN-EFE
Costa Rica registra en los primeros cinco meses del 2010 cuatro veces la cantidad de casos de dengue que en el mismo periodo de 2009 y confirma la primera muerte este año por esa enfermedad, informaron hoy fuentes sanitarias.
La ministra costarricense de Salud, María Luisa vila, explicó en conferencia de prensa que a mayo se registran 6.521 casos de dengue en todo el país, mientras que para el mismo periodo de 2009 la cifra era de 1.584.
La cantidad de enfermos durante lo que va del 2010 se acerca al total del 2009 que fue de 7.214, por lo que las autoridades reforzarán las medidas preventivas, las campañas informativas y la destrucción de criaderos del mosquito transmisor del virus, que se reproduce en aguas estancadas limpias.
“Con el dengue hemos sido muy exitosos en años anteriores. Este año tenemos que hacer un esfuerzo para que esa cifra (la acumulada a mayo) no se nos triplique” para el final del año debido a la época lluviosa, declaró la ministra vila.
La primera muerte del año por dengue hemorrágico es el de una mujer de 42 años que falleció en la zona norte del país hace algunos días, lo que supone la primera víctima mortal por esta enfermedad desde 2008 cuando murieron dos personas.
Hasta el momento se contabilizan 7 casos de dengue hemorrágico, variedad que puede causar la muerte, mientras en todo el 2009 la cifra fue de 17.
Las regiones más afectadas por el dengue son las costeras, en especial la provincia de Guanacaste (Pacífico norte) y Puntarenas (Pacífico central y sur), pero también hay brotes importantes en la zona sur del país.
Además, se detectó un brote atípico en un barrio de la capital, provocado por agua estancada en más de 300 llantas en un patio de una casa, lo que creó el ambiente ideal para los criaderos del mosquito Aedes aegypti, que transmite el virus.
La ministra dijo que en el mes de junio las autoridades reforzarán la fumigación y las inspecciones para eliminar criaderos, así como las campañas informativas en medios de comunicación, escuelas y centros de salud.
El dengue produce fiebre y dolores corporales, mientras la variedad hemorrágica ocasiona además pérdida de sangre que puede conducir a la muerte.