MIAMI/ AFP/ ACAN-EFE
La tormenta tropical Alex se convertirá en huracán y se fortalecerá hasta el momento de su impacto hoy contra la costa noreste de México y el sur de Texas, informó ayer el Centro estadounidense de Huracanes (NHC).
El fenómeno se desplaza por el Golfo de México al suroeste del gigantesco vertido de petróleo —provocado por la compañía británica BP— que se extiende frente a las costas estadounidenses de Luisiana, Alabama, Misisipi y Florida, en el sur del país. Si bien el ciclón se mantendría a distancia de la marea negra, sus vientos afectarían las tareas de recuperación y limpieza en la región. “Imágenes de satélite muestran que Alex está más organizada… y se espera que se convierta en huracán, con un fortalecimiento continúo hasta el momento que toque tierra”, indicó ayer el meteorólogo Jack Beven, experto en huracanes del NHC.
Ayer el ciclón se desplazaba en dirección noroeste a 20 kilómetros por hora con vientos máximos de 110 kilómetros por hora, que se extienden hasta 280 desde su centro.
La costa este mexicana estaba bajo advertencia entre la boca del río Grande y la ciudad de La Cruz. Y desde el sur de Bahía Baffin y la boca del río Grande en el estado de Texas, manifestó el organismo. Asimismo, el Gobierno mexicano emitió una alerta de tormenta tropical al sur de La Cruz y hasta Cabo Rojo.
“El centro de Alex se aproximará a la costa noreste de México y sur de Texas el miércoles (hoy) y tocará tierra en el sector bajo advertencia de huracán” esta tarde o noche, señaló Beven.
Las lluvias de Alex podrían provocar una acumulación de agua de hasta 300 milímetros en sectores del noreste de México y el sur de Texas.
Torrenciales lluvias y deslaves causados por Alex dejaron una decena de muertos en El Salvador, Nicaragua y Guatemala, e inundaciones en el istmo y México.
La temporada de huracanes en el Atlántico norte se desarrolla entre junio y noviembre.
Ver en la versión impresa las páginas: 8 A