Por Saúl Martínez y Glomara Iglesias
[/doap_box][doap_box title=” Tres días sin el vital líquido” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]
Gloria Elena Pérez, habitante del Bélgica, manifestó que ese sector no tiene agua porque dicen están en una zona alta, en invierno y verano se da la misma situación, aunque en la época seca el desabastecimiento se intensifica.
Pérez agregó que cuando llamaban a Enacal les decían que era un problema con una bomba y de energía, pero dijo que ya están cansados porque no les dan soluciones rápidas.
“En mi casa hay una niña de un año y dos más, de nueve y diez, fue preocupante cuando ya no teníamos agua para beber, porque la poca que teníamos ya la habíamos usado”, dijo.
Grace Moncada, habitante del Rubén Darío, comentó que ahí el problema es peor, ya que cuando llega el vital líquido es después de las once de la noche y se tienen que desvelar para tratar de recoger lo más que se pueda. En su casa hay dos bebés.
Pobladores de estos sectores hicieron un llamado a Enacal para que cuando hayan desperfectos al menos avisen para guardar agua, pero que además den una explicación del por qué siempre se da ese problema de desabastecimiento.
Qué dice Enacal
El responsable del área técnica de la empresa de acueductos en Carazo, Julio Solís, dijo que el problema de falta de agua se debió a que se reventó un tubo de la línea principal en el barrio La Cruz, aledaño al Bélgica y Rubén Darío y cuando eso pasa no pueden bombear, porque toda el agua se sale por ahí.
Agregó que también hay un pozo que está fuera de servicio (y en parte lleva agua a las zonas afectadas), porque se fundió, éste se ubica en La Ceiba, en el barrio La Cruz.
Solís señaló que el agua llega poco a esos sectores, porque son los barrios más altos de la ciudad, pero se prevé esa situación mejore cuando se incorpore un nuevo pozo en el sector conocido como Piquín Guerrero, el cual ya está perforado.
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CORRESPONSALES
El desabastecimiento de agua en unos 12 barrios de Chinandega y del municipio de San Marcos, en Carazo, mantiene agobiados a los pobladores que tienen que ingeniárselas para conseguir un poco del vital líquido.
En el caso de Chinandega, los dos principales pozos que abastecen de agua a la ciudad se encuentran en mal estado, lo que ha provocado crisis en los últimos tres días en la parte alta e intermedia. Los pobladores claman por el vital líquido y se estima que hay unos 10 mil usuarios afectados.
Habitantes de la colonia Gracsa, repartos José Benito Centeno, Corazón de Jesús, Rubén Darío, Pedro Joaquín Chamorro, San Luis, Montserrat, Los Ángeles, Carmita, Dávila Bolaños y el centro no tienen agua durante el día.
En las oficinas de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (Enacal) representantes dijeron que laboran intensamente para reparar las bombas Las Pilas, en el costado este del reparto Carmita y el pozo La Mora, en la entrada de la comarca Santa Bárbara.
El ingeniero Luigi Navas, jefe de operaciones de Enacal, señaló que el jueves inició la instalación del equipo de bombeo del pozo Las Pilas y que por atrasos reiniciaron ayer, con la promesa de restablecer el servicio en un 75 por ciento.
“Estamos trabajando con el equipo La Mora, que genera 8 mil metros cúbicos de agua, esperamos que el taller en León entregue pronto las piezas para instalarlas a más tardar el lunes, así normalizaríamos todo el servicio”, comentó el funcionario.
Los pozos El Calvario y Los Ángeles, que cubren la zona baja no han generado problemas, pero con ellos no se logra mantener la presión adecuada para los sectores desabastecidos.
EN BUSCA DEL AGUA
La situación es igual todos los días: la gente sale con pichingas, bidones, baldes y barriles en busca del vital líquido.
Carlos Aguirre, vecino del reparto Carmita y dueño de un pozo, ha sido visitado por decenas de habitantes que le solicitan agua para el consumo y los quehaceres domésticos.
En la colonia Gracsa los pobladores aprovechan el agua de lluvia y adquieren en 15 córdobas el litro de purificada para el consumo de los niños.
También los pobladores hacen fila para obtener un poco de agua en el pozo del Colegio Mántica Berrío.
Los bomberos Federados han abastecido con sus pipas el mercado central, con la ayuda de voluntarios de la Cruz Roja.
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