MAYAGUEZ/EFE
La lluvia que desde hace varios días cae de forma intensa e intermitente sobre Mayaguez y sus alrededores ha logrado que varios deportes hayan tenido que ser suspendidos, reprogramados o detenidos en los Juegos Centroamericanos y del Caribe.
La última incidencia ocurrida fue durante el juego final de badminton masculino cuando el servicio de electricidad en el coliseo Raymond Dalmau de Quebradillas (norte) se cayó, deteniendo varios minutos el partido.
Las constantes lluvias también han hecho estragos en la celebración de los encuentros de béisbol en el estadio Isidoro Cholo García de Mayaguez y el parque Luis Canena Márquez de Aguadilla.
Hoy tuvo que retrasarse el partido de Nicaragua contra Antillas Holandesas, equipo que tiene pendiente de disputar un encuentro con México desde hace tres días que pese a su reprogramación diaria no se ha podido jugar debido a los problemas meteorológicos.
El partido de béisbol del jueves entre Puerto Rico y Panamá se retrasó por unas tres horas debido al agua que cayó en el estadio García.
Hoy Puerto Rico ha visto como su choque con Islas Vírgenes quedó suspendido y los encuentros de softbol también se pospusieron en el parque Santiago Llorens de Mayaguez.
La naturaleza ha sido desde el primer día un factor en los Juegos. El día 17, una fuerte ráfaga de viento tumbó una torre de luces que se iban a utilizar para la apertura de los Juegos y que cayeron sobre un auto que pasaba por la parte posterior del estadio centroamericano, hiriendo a varias personas.
El pasado martes, la final de clavados en el evento de trampolín de tres metros femenino fue pospuesto por la lluvia que cayó en el natatorio en la Universidad de Puerto Rico en Mayaguez justo cuando iba a comenzar la competencia.
A pesar de ser un evento acuático, la actuación de los atletas se ha visto afectado por la lluvia y el viento.