A través de un espectacular equipo que mantuvo el beisbol en un nivel inalcanzable para los demás, Venezuela terminó su labor en el X Campeonato Panamericano de Beisbol Infantil AA, atrapando la corona de monarca, naturalmente.
Y lo hizo como de costumbre, mediante un nocaut 11-1 sobre México en el partido final, que volvió a contar con un estupendo ambiente ofrecido por aficionados al beisbol, que se repusieron rápido a la eliminación de Nicaragua y fueron a apreciar el buen espectáculo.
Venezuela no se anduvo con rodeos ante los mexicanos, quienes, tras quitar de su camino a los Estados Unidos, parecían capaces de hacerle muecas al gigante suramericano, pero no hubo nada de eso. En el propio arranque, la tropa vino tinto dejó al descubierto sus intenciones.
Jorge Espinoza disparó jonrón por Venezuela en el primer episodio y dio origen a un racimo de tres anotaciones, que marcó la salida del abridor azteca Julio Urías. Pero la agresividad siguió ante Eduardo González.
Tras pisar una vez más el plato en el segundo episodio, los venezolanos se desbordaron con un operativo de siete carreras en la tercera entrada y ahí quedó definido el nocaut.
Franklin Barreto, uno de los principales cañoneros de la tropa venezolana, se voló la cerca para sellar el racimo de siete carreras, que, además de expulsar a González de la colina, dio paso al relevista Manuel Moreno, quien bajó el gas a sus rivales, pero su esfuerzo resultó inútil.
Silfredo Terán abrió y ganó por los suramericanos, aunque fue a él a quien los aztecas le fabricaron su única carrera del juego, en el tercer episodio, cuando Jorge Olivas disparó doble y Héctor Chapas le siguió con hit.
Jesús Bastos y Adrián Navas se encargaron de completar el trabajo por Venezuela, que se llevó la victoria en cinco episodios, haciéndose notar a base de poder y pitcheo certero de principio a fin, en un torneo que dejó una grata impresión.
Tras concluido el partido se procedió a la ceremonia de clausura, en la que se entregó el trofeo de campeón y medallas de oro para Venezuela, de subcampeón para México y tercera lugar para los Estados Unidos.
CIERRE PERFECTO
Estados Unidos aseguró su medalla de bronce al vencer 6-0 a Brasil, mediante un juego perfecto que de forma combinada forjaron tres lanzadores.
Jospeh DeMees, Adam Haseley y Kiko García fueron los encargados de retirar en orden a los 21 bateadores brasileños.
DeMees retiró a los primeros 19 bateadores, de ellos 10 por la vía del ponche, para 6.1 entradas perfectas. Haseley sacó un out y García completó la hazaña abanicando al último bateador.
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