Esperanzado en que por ser una ilegalidad que afecta a toda la nación y que puede provocar que gran parte de ese 60 por ciento de la población que sobrevive con un dólar al día se quede sin su nuevo documento de identidad, el abogado especialista en derecho fiscal Julio Francisco Báez Cortés presentará hoy ante la Contraloría General de la República (CGR) una denuncia por el cobro de la sustitución de la cédula de identidad que ha impuesto el Consejo Supremo Electoral (CSE).
Báez Cortés argumenta que el CSE está sustentando el cobro de 300 córdobas por la emisión de la nueva cédula en el artículo 36 de la Ley de Identificación Ciudadana, que está derogado desde 1995 por causa de las reformas constitucionales.
Por lo tanto, viola los artículos 114 y 115 de la Constitución, el artículo 9 del Código Tributario y el artículo 57 de la Ley de Administración Financiera y del Régimen Presupuestario.
Sostiene que no es la institución como tal la que comete delito, sino los funcionarios responsables de imponer el cobro.
El especialista explica que, según el Código Penal vigente, son tres los delitos que se pueden aplicar en el caso: abuso de autoridad o funciones, malversación de caudales públicos y el de exacciones.
EXPERTO A LA ORDEN DE CONTRALORES
Báez Cortés presentará la denuncia para que se conozca en el Consejo de Contralores que se realiza cada semana, además se pondrá a la orden del Consejo para asistir a la reunión de los jueves, si es que esa instancia lo considera pertinente, para hacer la presentación y aclarar las dudas de los funcionarios.
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“No me limito a la denuncia. En la denuncia misma voy a advertir al Consejo que estaría a sus órdenes para asistir a la reunión y documentarlos más, o para atender sus inquietudes que permitan mejor proveer. Voy a presentar la base jurídica de por qué es absolutamente improcedente el cobro y las cédulas tienen que ser gratis como es la grita nacional”, enfatizó Báez Cortés.
El abogado confía en que la promesa del presidente de facto de la contraloría Guillermo Argüello Poessy (que desde el sábado dijo a LA PRENSA que propondría a sus compañeros que el equipo jurídico de la institución revisara el caso), surta sus efectos.
LA POSICIÓN DE ARGÜELLO POESSY
Además, Argüello Poessy declaró este lunes a un medio local que para él “la discusión no debe estar en (cuanto es) el monto que se quiere cobrar o que se está cobrando (por la nueva cédula)”, sino en que éste debe ser gratuito, porque es obligación del Estado entregar el documento.
Para Báez Cortés ésta es una señal de que la denuncia ya hizo eco en el funcionario y confía en que en esta ocasión se haga valer la ley y se anule el cobro. Además, que se castigue a los responsables de cometer estos abusos y se averigüe el destino de los recursos que el CSE ha adquirido desde que comenzó el proceso de sustitución de cédulas hace algunos días.
CSE INSISTE EN QUE CALIDAD DEL DOCUMENTO COMPENSA EL PRECIO
Aunque el CSE insiste en que el precio de la nueva cédula, alrededor de 14 dólares, se origina por la calidad del documento, expertos en fabricación de este tipo de identificaciones aseguran que aún con sofisticadas medidas de seguridad su fabricación en cualquier empresa del mercado internacional no supera los 3 dólares.
Únicamente las que poseen un chip incorporado con información biométrica, que puede poseer geometría facial, huellas de todos los dedos de la mano, identificación de la voz, de la retina, el iris y hasta el ADN pueden, como la que extiende actualmente el Registro Nacional de las Personas (Renap) de Guatemala, o la que entrará en vigencia en los próximos meses en Honduras, llegar a tener un precio máximo de 12 dólares en el mercado internacional.
VOCERO DE CSE EN RIDÍCULO
Ayer en declaraciones a la periodista Norma Castellón de Canal 10, el vocero del CSE Félix Navarrete (que no da declaraciones a LA PRENSA) insistía en que la gente tiene que valorar la calidad del documento antes de criticar el costo, porque es “policarbonato con altos niveles de seguridad y fabricado con material importado”, según él toda una novedad en latinoamerica.
Sin embargo, en todos los países de Centroamérica se extienden documentos de policarbonato con medidas de seguridad similares y hasta superiores —chip con información biométrica las de Guatemala y las próximas que usarán en Honduras— a las que contiene la cédula nicaragüense y por mandato de ley se entregan de forma gratuita.
Sólo en casos en los que el ciudadano la pierde o deteriore y solicita su reposición debe cubrir un costo que no alcanza en ningún país los 14 dólares que se están cobrando aquí.
En Panamá, a finales de agosto comenzarán un proceso de sustitución de cédulas. Se entregarán documentos similares a los que está entregando el CSE. La primera entrega será gratuita y cuando el portador la pierda, deberá pagar una penalización de cerca de 25 dólares para que le sea repuesta.
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