SAN SALVADOR/AFP
El presidente de El Salvador, Mauricio Funes, tras condenar este sábado la masacre de 72 migrantes en México, entre ellos 12 salvadoreños identificados, pidió a su par mexicano Felipe Calderón una reunión para tratar el refuerzo de la lucha contra el crimen organizado.
“La demencial matanza acaecida en el Estado de Tamaulipas ha conmocionado a nuestros países y a la comunidad internacional, y constituye una muestra de la magnitud que ha alcanzado el accionar de las bandas del crimen organizado” en México, señaló Funes en una carta enviada a Calderón.
En ese texto, el mandatario salvadoreño enfatiza que las familias de las víctimas “esperan de nuestros gobiernos respuestas efectivas y castigos ejemplares para recuperar la paz en sus corazones”.
Hasta el viernes, según datos revelados por la cancillería salvadoreña, en la masacre se había establecido que habían muerto 12 salvadoreños, tras ser reconocidos 31 de los 72 cuerpos de los migrantes asesinados.
Ante el crecimiento de la violencia criminal en México, Funes pidió a Calderón que si “lo considera conveniente, sugiero una reunión, en el marco del vínculo binacional México-El Salvador”.
Esa reunión serviría, dijo Funes, “para fortalecer las tareas conjuntas en la lucha contra el crimen organizado y para establecer un nexo más fluido y operativo entre México y el SICA (Sistema de la Integración Centroamericana)”.
“Esta guerra no se gana con los métodos y las herramientas con que tradicionalmente se combatía la inseguridad. El desafío de los criminales y delincuentes reclama de los Estados otras respuestas, otras armas y la inteligencia de que debemos unir nuestras fuerzas y voluntades para doblegar al enemigo”, subrayó Funes.