GUATEMALA/EFE/AFP
Las autoridades guatemaltecas confirmaron ayer la muerte de al menos 36 personas en diferentes accidentes provocados por las lluvias que azotaron esta nación centroamericana y reconocieron que al menos 40 más permanecen soterradas en una carretera del oeste del país.
Según el último reporte oficial de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), las lluvias se han cobrado la vida de 36 personas en entre el sábado y domingo, 40 han sido reportadas como desaparecidas y medio centenar con heridas de gravedad.
“En las últimas 24 horas hemos atendido 189 emergencias de distinta naturaleza” provocadas por las lluvias, dijo en rueda de prensa el presidente Álvaro Colom, tras sobrevolar las zonas del oeste del país afectadas por los aguaceros caídos en las últimas horas.
“Es doloroso que la gente más pobre sea la que pague las facturas de los fenómenos naturales”, lamentó el mandatario al pedir a los ciudadanos colaborar con los cuerpos de socorro y abstenerse de salir de sus residencias para evitar mayores desastres.
- Lo más preocupante para las autoridades de la región es que lo más crudo de la temporada apenas se inició el pasado 1 de septiembre y se prolongará al menos hasta el 30 de octubre.
Las últimas víctimas fueron tres niños golpeados por un árbol que al desprenderse cayó sobre un microbús escolar.
En Costa Rica, tres personas murieron el viernes pasado en la norteña provincia de Guanacaste tras un derrumbe que sepultó una vivienda.
Las lluvias en este país han causado el colapso de puentes y carreteras en diferentes localidades, así como daños considerables a viviendas.
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El secretario de la Conred, Alejandro Maldonado, dijo en rueda de prensa que 30,500 personas se encuentran en riesgo, 41,865 ha sido directamente afectadas, 10,162 evacuadas hacia lugares seguros y 6,996 llevadas a albergues temporales.
El comandante de los Bomberos Voluntarios Departamentales, Carlos Ruiz, indicó a medios locales que hasta las 12.00 horas local (18.00 GMT), habían logrado rescatar 21 cadáveres de las decenas de personas que anoche quedaron soterradas por un alud de tierra, lodo y rocas que cayó sobre la carretera Interamericana, en el kilómetro 171 al oeste del país.
Aunque versiones preliminares de los cuerpos de socorro hablaban de más de un centenar de soterrados, Ruiz aseguró que “según los vecinos y familiares, se cree que aún se encuentran soterrados entre 35 y 40 personas”.
“Vamos a seguir trabajando en el rescate. Esperamos que no llueva porque eso dificultará los trabajos y tendríamos que suspenderlos”, señaló Ruiz.
LLUVIA NO DIO TREGUA
Según la Conred, el alud cayó sobre cinco automóviles y un autobús que pasaban por ese lugar, y los arrastró hacia un barranco de unos 300 metros de profundidad.
Decenas de habitantes de las comunidades vecinas quedaron soterrados cuando un segundo derrumbe los sorprendió mientras apoyaban a los cuerpos de socorro en el rescate de las víctimas.
Expertos en búsqueda y recuperación de víctimas de la Unidad Humanitaria y de Rescate del Ejército y de los equipos de respuesta inmediata de la Conred, se unieron hoy a los más de 150 socorristas que trabajan en el rescate de las víctimas.
“Es humanamente comprensible que (los pobladores) quisieran ayudar a buscar a sus familiares y amigos, pero el cerro se vino y se los llevó. No tenemos un número estimado (de víctimas), de momento van 21 cadáveres (rescatados) pero pueden haber más”, señaló Colom.
Las lluvias, que han empezado a amainar, han dejado destrucción de puentes y carreteras, más de 80 derrumbes de diferentes magnitudes, destrucción de cultivos agrícolas, inundación de centenares de viviendas.
Colom, quien ayer declaró “emergencia nacional” por los estragos de los aguaceros, cuantificó los daños entre 375 y 500 millones de dólares, y pidió al Parlamento aprobar una ampliación al presupuesto de este año y un impuesto temporal al que denominó “bono de reconstrucción” para hacer frente a la catástrofe.
El ministro de Comunicaciones, Guillermo Castillo, dijo que debido a que los suelos se encuentran saturadas de agua debido a las lluvias, “es previsible que se den más derrumbes y deslizamientos.”
El funcionario aseguró que decenas de cuadrillas trabajan en la rehabilitación de las principales carreteras del país, pero advirtió que su cartera no cuenta con recursos suficientes para reconstruir las vías y puentes afectados.
En Honduras, las estimaciones más recientes ubican en 55 el número de fallecidos en diversos episodios, el último de los cuales se produjo el fin de semana en Tegucigalpa, con saldo de cinco muertos y 1,600 evacuados.
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