MÉXICO/ CABLES COMBINADOS
El Gobierno mexicano informó ayer que la “etapa más crítica” del huracán Karl ya pasó, pese a que fallecieron cinco personas y otras cinco más se encuentran desaparecidas, mientras que el país se prepara ahora para soportar fuertes lluvias por los remanentes del meteoro. La peor parte se la llevó el estado de Veracruz, donde las intensas lluvias provocaron el desborde de ríos, viviendas inundadas y al menos seis desaparecidos.
Los remanentes de Karl seguirán provocando lluvias en los estados del centro del país, incluida la capital, así como en Tamaulipas y Veracruz, sobre el Golfo de México, indicaron las autoridades.
El gobernador de Veracruz, Fidel Herrera, calculó “que son 250,000 (damnificados) de manera directa asociados al huracán Karl”, muchos de ellos en pequeñas poblaciones ubicadas en la ribera de los ríos.
El puerto de Veracruz, con una población de más de medio millón de habitantes, amaneció este sábado con 17 colonias sin electricidad, árboles caídos, al menos un centenar de postes derrumbados, semáforos destruidos, así como daños en un número aún no determinado de viviendas y automóviles.
Las intensas lluvias desbordaron ríos en Veracruz, entre ellos el Cotaxtla que pasa a un costado de la población del mismo nombre de unos 5,000 habitantes y que alcanzó una altura de hasta siete metros, dañando decenas de casas y locales comerciales. Las autoridades, rescatistas y pobladores buscaban ayer a cinco personas reportadas como desaparecidas.
Óscar Rojas Hernández, padre de un pequeño de dos años que murió, relató a la AP que después de la medianoche se percató de que el río crecía y salió de su casa a buscar ayuda. Cuando regresó la corriente le impidió entrar a su casa.
Desde una distancia de unos 20 metros vio cómo el agua subía y le gritó a su esposa embarazada, a días de dar a luz, y a su mamá que subieran al techo de la residencia de dos pisos. Lo hicieron, junto con su hijo, aunque ya no hubo tiempo de rescatarlos, debido a que el caudal tapó la vivienda por completo.
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