LA HABANA/AFP
Miles de asambleas se realizan esta semana en centros de trabajo y barrios de Cuba para explicar la decisión del gobierno de Raúl Castro de eliminar un millón de empleos estatales, en un intento por aplacar la inquietud e incertidumbre entre la población. El propósito es “hacer comprender a los trabajadores la necesidad impostergable de aplicar esa política …”, explicó el secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC, única), Salvador Valdés, citado ayer por el semanario Trabajadores .
La CTC encabeza las asambleas en todos los centros de trabajo de Cuba, a partir de un tabloide que contiene el discurso de Raúl Castro ante el Parlamento, el 1 de agosto, donde argumentó su decisión de eliminar en los próximos años más de un millón de empleos estatales, 500,.000 antes de marzo de 2011.
El procedimiento: se lee el texto, se explica y se toman opiniones de los participantes que luego son resumidas y entregadas al Gobierno.
De igual forma se debe proceder en las asambleas de barrio, encabezadas por los Comité de Defensa de la Revolución (CDR), una organización de masas vecinal que agrupa a ocho de los 11.2 millones de cubanos.
Muchos comentan en la calle su inquietud por “lo que viene”, sobre todo padres de familia, que toda su vida han sido empleados del Estado, con salario insuficiente (20 dólares en promedio), pero que con seguridad llega cada mes.
Otros documentos que circulan entre dirigentes señalan que para reubicar a los cesantes, el Gobierno otorgará más licencias para el trabajo por cuenta propia en unos 140 oficios. Pero el mayor número de desplazados, según lo previsto, irá a cooperativas urbanas que se crearán en unos 40 servicios y pequeñas producciones, así como para transporte, construcción y agricultura.
El Gobierno y la CTC reiteran en que “nadie será abandonado a su suerte”, pero las compensaciones previstas sólo alcanzan de uno a cuatro meses de salario.
COMPLETA GABINETE
Castro culminó ayer la renovación del equipo económico que heredó de su hermano Fidel con la destitución de la ministra del estratégico sector de energía y minería, en plena reforma de la economía socialista y combate a la corrupción.
La ministra de la Industria Básica, Yadira García, fue destituida por “deficiencias en la dirección” y “débil control de los recursos destinados al proceso inversionista y productivo”, según un nota publicada en el diario oficial Granma.
García estaba desde 2004 al frente de la cartera económica del “superministerio”, pues abarca las industrias petrolera, química y petroquímica, generación eléctrica y minería. El sector estará a cargo del viceministro Tomás Benítez mientras se nombra al titular.
Los movimientos de Raúl Castro tomaron velocidad luego que el líder Fidel Castro sorprendió con su frase “el modelo cubano ya no funciona ni siquiera para nosotros”, dicha a un periodista estadounidense, aclarando luego que lo que no servía era el capitalismo.
Ver en la versión impresa las páginas: 10 A