El ex ministro de Hacienda Mario Arana y el diputado liberal y miembro de la Comisión Económica, Francisco Aguirre Sacasa, calificaron de “acertada” y “prudente” la decisión del Gobierno de no pedir recursos adicionales al Fondo Monetario Internacional (FMI), si Nicaragua cuenta con suficientes reservas internacionales y un exceso de liquidez en el sistema financiero.
La estabilidad que dan estos elementos hace que el Gobierno se sienta “cómodo” y ahora sólo necesita mantener el aprobado del organismo internacional, para que siga llegando cooperación e inversión a Nicaragua, opinaron los dos especialistas.
- Para el ex ministro de Hacienda, Mario Arana, es posible que aun aprobando la continuidad del programa con Nicaragua, el Directorio Ejecutivo del FMI ponga sus condiciones.
“Vamos a ver si no hay sorpresas, porque pueden ocurrir diferentes opciones dentro del Directorio. Será interesante ver cómo resulta la votación, porque aun con mayoría se van a expresar preocupaciones sobre Nicaragua”, dijo.
Cree que estarían enfocadas en que incluso con un manejo responsable de la macroeconomía, hacen falta otros elementos para propiciar la inversión, como la institucionalidad, estabilidad política y social.
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El presidente del Banco Central de Nicaragua, Antenor Rosales, informó el lunes que el Gobierno ya remitió la Carta de Intención y el Memorando Técnico de Entendimiento al Director Gerente del FMI, y ahora sólo esperan la fecha en que el Directorio Ejecutivo los discutirá.
Pero no pide aumento de disponibilidad de recursos, sino el desembolso de 36 millones de dólares pendientes.
Arana dice que ésa es la parte de “las libertades que el país puede tomarse”, si hay reservas internacionales por encima del compromiso en el programa con el FMI.
Las reservas actuales del país suman 1,559 millones de dólares, y representan tres veces la cobertura de la base monetaria.
Arana señaló que por eso el Gobierno nicaragüense se siente seguro de que el Directorio del FMI aprobará, sin mayores problemas, la cuarta y quinta revisiones del programa y votará a favor de extenderlo por un año, tal como se le solicita.
“Normalmente, cuando el país envía una Carta de Intención, se puede decir que ya existe un apoyo y respaldo del equipo técnico del Fondo al programa negociado, lo cual hace que las perspectivas sean muy buenas”, explicó Arana.
De concretarse en este mes, “será muy positivo porque emite la señal clara de que el país mantiene una estabilidad macroeconómica, que es fundamental para la inversión”, indicó.
FONDOS VENEZOLANOS EN LOS BANCOS
El diputado Francisco Aguirre Sacasa comentó que aun cuando las relaciones con el FMI sean buenas, “por el hecho de que la macroeconomía oficial marche bien”, no debe evadirse el problema de que el Gobierno no maneja con transparencia la cooperación de Venezuela.
El informe del BCN indica que la cooperación externa oficial suma 582.9 millones de dólares en 2010, por encima de los 505 millones de dólares de 2009. Pero ese informe no identifica cuánto proviene de Venezuela.
“La gran debilidad de todo esto es que sigue fuera del control, y me atrevo a decir del mismo Fondo Monetario, la plata venezolana que entra a Nicaragua”, dijo Aguirre.
Considera que buena parte de este dinero se está acumulando en los bancos, y contribuye al exceso de liquidez que puede en algún momento causar un problema.
“Pero los bancos no están prestando, porque no hay suficiente confianza del inversionista para prestar a proyectos, porque las reglas del juego y el respeto al sector privado, contrario a lo que se dice y piensa, no son los adecuado todavía”, aseveró.
“Este gran elefante llamado ayuda venezolana no puede seguir fuera de control”, alertó Aguirre.
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