Durante el 2010 la venta de viviendas, especialmente las de interés social, fue limitada por la restricción del crédito.
Alfonso Silva, vicepresidente de la Cámara de Urbanizadores de Nicaragua (Cadur), informó que en lo que va del año se vendieron unas 3,200 viviendas, de las cuales unas 2,400 son de interés social (con un precio inferior a los 30 mil dólares). Ese número se ampliaría a 2,500 en lo que resta del año.
La meta establecida para este año, a raíz de la entrada en vigencia de la Ley Especial para el Fomento de la Construcción de Vivienda y de Acceso a la Vivienda de Interés Social, era vender al menos unas cuatro mil casas. Esa meta fue truncada, apuntó Silva, por la restricción del crédito hipotecario.
“Los bancos fueron extremadamente cautelosos y restrictivos del crédito”, afirmó Silva.
El representante de Cadur agregó que las instituciones financieras, para tramitar los créditos, esperan a que los proyectos de viviendas estén terminados, lo cual también retrasó las ventas.
Otro factor para el incumplimiento de la meta, afirmó Silva, es que “la población no terminaba de entender, asimilar, los beneficios de la ley (de vivienda social) y subsidios”, por lo cual hubo cierta lentitud entre la ciudadanía a la hora de tramitar la compra de una vivienda.
22 PROYECTOS TERMINADOS
Durante este año, apuntó el vicepresidente de Cadur, se logró arrancar la construcción de 22 proyectos de viviendas, lo que se traduce en unas 20 mil nuevas casas. Será hasta el próximo año que gran cantidad de esos proyectos se construyan totalmente, lo cual aumentará la oferta de viviendas.
Para garantizar mayor colocación en 2011, la próxima semana Cadur se reunirá con la Superintendencia de Bancos para analizar el incremento en las provisiones para el crédito hipotecario, lo cual afectaría la venta de viviendas.
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