CORRESPONSAL/NUEVA SEGOVIA
Doce grupos delincuenciales, que operaban en diferentes áreas en Nueva Segovia, fueron desarticulados en el 2010 por la Policía, pero además se realizaron tres operativos contra el crimen organizado. Sin embargo, de los 56 detenidos sólo 32 fueron condenados, dado que para el resto de casos el Ministerio Público no encontró méritos, por falta de pruebas.
El comisionado Pablo Ardón, jefe de Secretaría Ejecutiva de la Policía en Nueva Segovia, mencionó que entre las bandas desarticuladas está “La Salamají”, del municipio de San Fernando; la del “Chele Leyenda”, de Jalapa; la de “Yajob”, que es señalada de asesinar a “Piraña” en la comunidad de La Palanca, municipio de Quilalí.
Entre otras destacan las bandas “San Albino”, de El Jícaro, que se dedicaba al abigeato y contrabando; la de “Tincute”, que operaba entre Ocotal y Mozonte en la ejecución de robos con intimidación; la de “El Gato”, que operaba en el municipio de Wiwilí; el grupo de Richard, que se dedicaba al robo de vehículos y el que cometió el robo a la sucursal de Acodep en Ocotal.
Uno de los casos que no llegó al juzgado es el de la banda “San Albino”, del municipio de El Jícaro, cuyos miembros fueron puestos en libertad porque el Ministerio Público no encontró méritos suficientes para acusarlos, recordó el comisionado Ardón.
En los operativos a los grupos delincuenciales la Policía ocupó 10 vehículos, cuatro escopetas, tres pistolas, dos rifles calibre 22, tres fusiles, un revólver, uniformes de oficiales del Ejército y Policía, entre otros.
En otras tres operaciones contra el crimen organizado, que no obedece a los planes de desarticulación de los grupos organizados, la jefatura de Nueva Segovia informó que recuperaron seis vehículos, seis armas de guerra, dos escopetas y cuatro pistolas en el borde fronterizo, en Las Manos.
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