Por Lucydalia Baca y María José Uriarte
La ratificación de una coalición electoral entre la Unidad Nicaragüense por la Esperanza (UNE) y la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), prevista para hoy, podría postergarse por días o semanas, ya que los miembros de ese movimiento político prefieren continuar negociando hasta alcanzar “acuerdos definitivos” antes de firmar.
Las desconfianzas políticas no fueron superadas ya que desde la mañana el diputado de la ALN, Carlos García, dejó abierta la posibilidad de atrasos en la firma de la alianza, que estaba a la espera de ser ratificada, además del Consejo Político de UNE, por la Directiva de ALN.
El sábado, en la reunión entre la UNE y ALN, se anunció que el candidato presidencial Fabio Gadea usaría la casilla 9 de ALN para competir por la Presidencia en las elecciones del 6 de noviembre, y que los detalles de la alianza electoral se revelarían hoy al ratificar el acuerdo.
Sin embargo, ayer, después de varias horas de discusión, el Consejo Político de la alianza UNE decidió que en el encuentro que sostendrán hoy dirigentes de ambas agrupaciones propondrán a la ALN seguir negociando hasta alcanzar acuerdos definitivos.
Al ser designado para dar a conocer la decisión, Mauricio Díaz se limitó a señalar que entre “algunos términos” que continuarán discutiendo los miembros de las comisiones negociadoras figuran los referidos a la representación legal de la futura alianza electoral, y evitó brindar más detalles de la agenda del encuentro de hoy.
Posteriormente, Eliseo Núñez Morales reconoció que firmarán cuando todo esté definido; “un acuerdo sólido es un acuerdo de detalles. Entonces si al final del acuerdo de detalles le queda la representación legal a la ALN, pues quedará en ALN, y si le queda en la UNE, quedará en la UNE”, apuntó Núñez Morales.
El también diputado al Parlacen explicó que “no puede hacerse un pedazo del acuerdo ahora” para que, en cumplimiento a lo establecido en el calendario electoral, Gadea se inscriba como candidato presidencial el 12 de marzo, y a partir de esa fecha “seguir discutiendo hasta mayo”, que es la fecha establecida para la presentación de candidatos a diputados.
Reconoció que los detalles que deben definirse antes de firmar el acuerdo tienen que ver con las diputaciones, los miembros de los consejos electorales municipales y departamentales y con “todo el paquete”, ya que el tema de la casilla es sólo el principio. Díaz y Núñez evitaron reconocer que la “desconfianza” influyó para decidir que se definan los detalles antes de firmar.
Para Núñez, la ALN ha demostrado “voluntad” y no va a permitir que los “detalles” detengan la voluntad de concretar el acuerdo. Atribuyó la decisión de esperar al “pragmatismo” y a la necesidad de dejar todo definido para dedicarse por completo a la campaña —que tendrá pocos recursos y será muy atacada por un gobierno poderoso—, sin tener que detenerse en detalles. Además, recordó que el tema de la casilla no puede influir demasiado, ya que Gadea sigue contando con la del Partido Acción Ciudadana (PAC).
Por su parte Díaz considera que no buscan retrasar la firma, sino darle la opción más atractiva al país y a la vez otorgar a ALN una gran oportunidad de reivindicación histórica ante el pueblo, no por el comportamiento del colectivo, sino por el de algunos miembros de la organización. También es de la opinión que con la casilla de ALN no lo tienen todo, ya que no cuentan con un candidato creíble y Gadea les otorga esa característica.
Una situación que miembros de la ALN aceptaron que no se definía era la integración de la lista de diputados, lo que aseguran se subsanaría antes que se venciera el tiempo establecido en el calendario electoral para la inscripción de candidatos para esos cargos en mayo.
García expresó que una de las condiciones para la alianza era que Gadea aceptara la casilla 9, lo que sucedió, así como nombrar a su compañero de fórmula, pero en lo que se refería a los diputados, era algo que todavía no estaba definido.
Una fuente conservadora destacó que no estaban interesados ya en una alianza con ALN-UNE, debido a que estimaban que Gadea estaba cayendo en la trampa del Frente Sandinista, ya que existen vínculos entre esta organización política y ALN.
Esto fue desestimado por García, quien afirmó que quien negocia con los sandinistas es el PLC, y que todo se trata de una campaña para “poner en temblores” a Gadea de postularse en esa casilla electoral.
Por su parte, Enrique Quiñónez, quien sí se expresó más seguro de la ratificación de la alianza, en un momento dudó al señalar que “hasta último momento cualquier cosa puede pasar”.
De acuerdo a la fuente conservadora, una de las trampas de ALN era atrasar el tema de los diputados, y después no brindarle muchos espacios a UNE.
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