PORT ST. LUCIE, Florida/AP
Francisco Rodríguez se puso el miércoles el uniforme de los Mets por primera vez en la pretemporada, luego que el equipo estuvo a punto de deshacerse del taponero venezolano el año pasado por un incidente de violencia doméstica.
Los Mets colocaron a Rodríguez en la lista de jugadores descalificados después del incidente de agosto en el que golpeó al padre de su novia en un pasillo del estadio Citi Field, y en el que se rompió un ligamento del dedo godo derecho.
Rodríguez se declaró culpable en diciembre de intento de agresión, tras un acuerdo con la Fiscalía que evitó que fuera a la cárcel. Como parte del acuerdo, tiene que participar en 52 semanas de terapia para controlar la ira.
“Me metí en una situación muy desafortunada”, dijo Rodríguez, quien afirmó que aprendió a separar la agresividad que exhibe en el montículo de su comportamiento fuera del terreno.
“Obviamente lo lamento mucho, pero tengo que superarlo. Tengo que aprender de esos errores. Me hizo crecer como persona. Lamento mucho por haber puesto en una situación difícil a mis compañeros, a los Mets y a los fanáticos”.
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