Como el ave fénix que resurge entre las cenizas, así algunos artistas han logrado vencer a la muerte. Para la cantautora nicaragüense Norma Helena Gadea la obesidad ha sido un problema. Ella padece una enfermedad llamada Tiroiditis de Hachimoto. Y se manifiesta en un metabolismo muy lento, que le impide quemar la energía como lo hace un cuerpo normalmente.
A raíz de eso, ella hace siete años se colocó una banda gástrica en su estómago, la cual fue rechazada por el cuerpo. El extraño objeto fue retirado quirúrgicamente después que una fuerte infección la mantuvo al borde de la muerte.
Ella asegura que haber estado muy cerca de la muerte la ha hecho ser una mejor persona y agradece cada instante la vida.
“Todavía tengo muchas cosas que hacer y solamente Dios marca el día y la hora que nos toca partir. Si te pone en riesgo es para hacerte más fuerte”, dijo.
De igual forma Augusto Mejía, integrante de La Cuneta Son Machín, estuvo muy cerca de la muerte en el 2009 producto de una complicada apendicitis. El artista fue operado en tres ocasiones.
Él asegura que a raíz de esa experiencia su visión de la amistad cambió por el apoyo de sus amigos. Además le sirvió como estímulo para dedicarse con más fuerza a la música y a su oficio como comunicador.
“Aunque fue una desgracia
de ahí saque energía y estímulo para seguir trabajando por la música nicaragüense y dar mi granito de arena para mejorar este país”, dijo.
OTROS VENCEDORES
Todo un ejemplo de superación fue la artista de origen cubano Gloria Estefan. Ella se encontraba en la cima de su carrera cuando el 20 de marzo del 1990 sufrió un accidente durante un viaje que hacía en autobús hacia Pensylvania, Estados Unidos.
Estefan estuvo a punto de perder la vida. Como resultado del accidente se fracturó dos vértebras y con la columna vertebral dañada ella corrió el riesgo de quedar paralizada. El 22 de marzo fue intervenida quirúrgicamente. Siete meses después logró ponerse de pie para recuperarse de este accidente.
Actualmente Estefan siguió cosechando un sinnúmero de éxitos, iniciando una gira mundial con el tema Desde la oscuridad.
De igual forma hace varios meses el actor estadounidense Michael Douglas conmovió al mundo de las celebridades en Hollywood, tras anunciar en compañía de su esposa Caterine Zeta-Jones que padecía un avanzado cáncer de garganta que lo obligó a suspender su trabajo y a iniciar un difícil tratamiento en pro de su recuperación.
Hoy, a sus 66 años y luego de esta difícil lucha, recientemente anunció que el cáncer de garganta está prácticamente erradicado de su cuerpo, gracias a casi dos meses de radiaciones y quimioterapias.
Sus admiradores y familiares están felices con la evolución, ahora solo esperan que continúe mejorando y que muy pronto pueda volver a los estudios de grabación que es el lugar en el que todos añoran que esté.
MUY DE CERCA
En cambio otras estrellas no han visto su vida es riesgo. Sin embargo han logrado ver a sus seres queridos, en un instante llenos de vida y al otro ser arrebatados por la muerte.
El actor Keanu Reeves tuvo dos experiencias con un margen de tiempo bastante corto. En diciembre de 1999, su novia Jennifer Syme dio a luz una niña muerta que fue llamada Ava Archer Syme-Reeves.
Dos años después Syme moriría en un accidente de tráfico, lo que llevaría a su viudo a enterrar su cadáver junto al de su hija en el cementerio Westwood Village Memorial Park de Los Ángeles.
En enero de 2009 John Travolta vio como con solo 16 años su hijo Jett moría víctima de la enfermedad de Kawasaki, mientras la familia se encontraba de vacaciones en Bahamas. Afortunadamente, él y su esposa, Kelly Preston, están superando esta desgracia
También el actor Liam Neeson fue fuertemente sorprendido el 16 de marzo de 2009. Su esposa Natasha Richardson tuvo un accidente mientras recibía clases de esquí para principiantes en el Resort de Mont Tremblant (Québec).
Inicialmente el incidente no parecía grave, pero dos días más tarde sufrió muerte cerebral.
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