CORRESPONSAL / BLUEFIELDS
Trece orcas encallaron frente a las costas de El Bluff, Bluefields, Región Autónoma del Atlántico Sur (RAAS), entre anteayer y ayer, y muchos pobladores de esa comunidad lucharon para regresarlas al mar, sin embargo, dos de ellas murieron por encontrarse seriamente heridas.
La delegada del Ministerio del Ambiente y Recursos Naturales (Marena), Johanna Schwartz, confirmó que los cetáceos son conocidos como falsa orca y se encuentran dentro de las especies protegidas, en la categoría dos.
“Son una especie poco estudiada, hay pocos datos y se nos dificulta poder en este momento definir por qué ellas están llegando a las costas, sin embargo, seguiremos haciendo las investigaciones, contactándonos con los organismos que manejan el tema para que nos ayuden”, declaró ayer Schwartz.
Según el Marena, las falsas orcas adultas miden poco más de seis metros, no obstante, las encontradas en El Bluff miden 3.5. “Entonces creemos que se encuentran en una etapa juvenil”, consideró la delegada del Marena.
Un funcionario del Marena dijo que a veces esas orcas tienen un comportamiento agresivo.
Saúl Reyes, técnico de esa institución y encargado de investigar las causas por la cual aparecieron los cetáceos en Bluefields, dijo que anteayer localizaron sobre las costas de falso Bluff a 13 de los cetáceos y que ayer los comunitarios reportaron cinco más.
UNA ARDUA LABOR
“Desde que nos dimos cuenta que ahí estaban nos fuimos a la playa, son dos horas de camino pero queríamos curiosear y cuando las vi me dio mucha lástima, entonces me junté con unos muchachos y nadando en el agua las regresamos al mar, fue difícil porque esos animales pesan”, dijo Ileana Ocampo, de 23 años.
Ocampo junto a más de 20 jóvenes lucharon bajo el inclemente sol y el vaivén de las olas del mar para que estas especies volvieran a su hábitat natural, el mar Caribe.
“Entre todos las empujábamos hacia el agua, luego nadábamos hacia la profundidad con ellas y cuando creíamos que se habían ido regresaban, y volvíamos a comenzar otra vez”, sostuvo Ocampo.
De los trece cetáceos, dos murieron, uno fue porque se encontraba seriamente herido y no aguantó y el segundo porque un poblador le arrancó con un machete unas 50 libras de carne para comérsela.
Ayer efectivos de la Fuerza Naval y dos técnicos del Marena junto a pobladores lucharon para que las orcas regresaran al mar.
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