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Piden desalojo de mineros

El Gobierno territorial de Wanky Li Aubra, del municipio de Waspam Río Coco, en la Región Autónoma del Atlántico Norte, demandó que los pequeños mineros artesanales que trabajan en la mina Santa Rosa o Murubila abandonen el sitio, debido a la contaminación por la utilización del mercurio y el desorden que se ha generado con el uso de las drogas y el licor.

CORRESPONSAL/RAAN

El Gobierno territorial de Wanky Li Aubra, del municipio de Waspam Río Coco, en la Región Autónoma del Atlántico Norte, demandó que los pequeños mineros artesanales que trabajan en la mina Santa Rosa o Murubila abandonen el sitio, debido a la contaminación por la utilización del mercurio y el desorden que se ha generado con el uso de las drogas y el licor.

La mina se ubica en la zona de amortiguamiento de la reserva Bosawas en el municipio de Waspam y se ha poblado con güiriseros que llegan del interior del país, Bonanza, Siuna, Rosita, Mulukukú y otros municipios.

Abraham Henríquez, presidente del Gobierno territorial, en nombre de 18 comunidades que viven en la zona ha solicitado a las autoridades varias inspecciones, una de ellas se realizó en julio pasado y dijo que hay contaminación del medio ambiente por la instalación de máquinas artesanales para el procesamiento de la broza aurífera, que utilizan mercurio, elemento altamente dañino.

FALTA SEGURIDAD

Además en el lugar hay venta de licor y drogas que son utilizadas por algunos mineros artesanales cuando se internan en las profundidades de la mina, por lo que corren el riesgo de quedar aterrados por la falta de medidas de seguridad.

Una fuente que visitó la mina recientemente, que solicitó el anonimato, dijo que no hay ley porque hay un excesivo consumo de licor y drogas.

Roberto Palma, líder del grupo de personas que han instalado rastras en la mina, ha solicitado a los líderes territoriales tres meses para poder trabajar en el verano y luego salir, sin embargo hasta ahora no hay ningún acuerdo.

Esta semana efectivos del Ejército visitaron la mina y sostuvieron una reunión con los líderes y los güiriseros, pero tampoco lograron acuerdos.

Uno de los problemas de contaminación encontrados en la mina por una comisión gubernamental es que no existe un manejo adecuado de almacenamiento de combustible (diesel) y aceites, pues estos son guardados en los mismos cuartos de habitación.

También se constató que en los primeros años, los mineros solo utilizaban 10 libras de mercurio en los molinos o máquinas artesanales para el procesamiento de la broza aurífera y ahora con la mejoría de la producción y la intensificación de labores se ha incrementado a 20 libras al mes.

Los pozos representan un peligro pues podrían desmoronarse y en cualquier momento puede ocurrir un accidente con consecuencias trágicas, ya que el cerro Guapinol ha sido perforado por dentro y actualmente en la parte externa, producto de actividades mineras de la década de los cincuenta a los ochenta.

La mina Murubila se divide en dos barrios: La Esperanza y Klisnack con 520 habitantes, 370 son miskitos y 150 son mestizos, en el lugar hay 68 chozas, construidas en su mayoría de pajas y plástico.

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