Por David Stringer
LONDRES/AP
Gran Bretaña expulsó este miércoles a cinco diplomáticos libios leales al régimen de Moamar Gadafi, alegando que intimidaron a partidarios de la oposición y representan una amenaza potencial a la seguridad del Reino Unido.
El secretario del Exterior, William Hague, dijo a la Cámara de los Comunes que ordenó la salida del país del agregado militar libio y otros cuatro diplomáticos.
“El gobierno también consideró que si estos individuos permanecieran en Gran Bretaña, podrían significar una amenaza para nuestra seguridad”, añadió Hague.
Funcionarios británicos dijeron que se consideraba a los expulsados los principales partidarios de Gadafi en la embajada en Londres y que habían intentado hostigar a miembros de la oposición Libia en el país europeo.
Hague también confirmó que diplomáticos británicos mantuvieron conversaciones en Bengasi, en Libia oriental, con dirigentes de la oposición, anticipando reuniones similares que realizan funcionarios estadounidenses y franceses.
“El propósito de la misión era reunirse con grupos clave de la oposición en Libia oriental, incluidos el Consejo Nacional Interino Transitorio y su consejo militar para adquirir un mejor conocimiento de la situación política y de seguridad”.
El primer ministro David Cameron, quien habló antes que Hague, confirmó que en opinión de Gran Bretaña existe un recurso legal que permite a las naciones suministrar armas a los rebeldes, pero destacó que Londres aún no ha decidido si lo hará.
Cameron dijo a los legisladores que según su asesoría legal, bajo la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU se podían entregar armas a los combatientes de oposición en ciertas circunstancias.
“No lo descartamos, pero no hemos tomado una decisión” sobre la entrega de pertrechos, dijo el jefe de gobierno al parlamento.