Los ancianos de la Unidad Nacional del Adulto Mayor (UNAM) solicitaron recientemente a las autoridades de la Alcaldía de Managua (Alma) que les den la oportunidad de insertarse en algunos proyectos que estén o vayan a ejecutarse próximamente.
No obstante, se espera que sea hasta después de Semana Santa que tendrán alguna respuesta.
La propuesta de los jubilados fue entregada por algunos miembros de la Junta Directiva de la UNAM, en el despacho de la alcaldesa sandinista designada para Managua, Daysi Torres.
En el documento, de la cual LA PRENSA tiene una copia, los ancianos plantean a Torres de que en vista de que el presupuesto designado por la comuna para la atención de áreas verdes y de recreación es limitado, ellos estarían dispuesto a crear un contingente que se encargue de esas labores.
En caso que la alcaldía capitalina acepte la propuesta, primero deberán “establecer un protocolo de cooperación y solidaridad en el cual se realizaría un levantamiento de un primer plan en conjunto con las instancias técnicas administrativas de la alcaldía y la UNAM para que se haga una valoración y análisis, determinado una estrategia de ejecución y estimado de costos con un listado de materiales e insumos”, indica el texto en una de sus partes.
Porfirio García, presidente de la UNAM, dijo que con la fuerza que aún conservan pueden perfectamente trabajar en las labores de mantenimiento y reparación de parques y canchas.
El líder de los jubilados expresó que además de contar con suficiente personal experimentado, los trabajos les ayudarían a distraerse y prologar sus vidas.
“El trabajo sirve de terapia para prolongar nuestras vidas, se comenzaría con los afiliados, aunque pueden quedar abiertas las puertas para todos los adultos que así lo deseen. Vamos a ver si nos dan la oportunidad”, indicó García, al adelantar que hasta después de Semana Santa tendrán una respuesta.
De llegar a algún acuerdo, los ancianos, además de reparar y cuidar las áreas de recreación de la ciudad, podrían, según su propuesta, construir casetas de seguridad, fabricación de rótulos, tarimas, fabricación de juegos infantiles y bancas para paradas de autobuses, entre otros.
Cuánto les pagarían por estos trabajo aún no se sabe, pero los ancianos propusieron que podrían retribuirlos con aportes solidarios, como paquetes alimenticios, medicamentos, vestuario y materiales de construcción.
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