La Semana Santa de este año en Nicaragua podría ser “infernal”. La radiación del sol, las altas temperaturas y el humo en el ambiente podrían ser más constantes que en años anteriores.
Según los datos del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter), existen “altas probabilidades” de que el sol, el calor y el humo predominen en el país.
“Son proyecciones de largo plazo, mientras más tiempo es mayor la posibilidad de error, pero hay altas probabilidades de que la Semana Santa sea soleada y calurosa. Además podría ser notable la presencia de humo en algunos departamentos del país”, explicó ayer Javier Jiménez, meteorólogo de Ineter.
Los rayos del sol resultan ofensivos en Nicaragua porque el país se encuentra en la zona tropical, que se extiende desde el trópico de Cáncer, en el norte, hasta el trópico de Capricornio, en el sur.
Esta es la parte más gruesa de la Tierra y, por lo tanto, la que recibe los rayos del sol de forma perpendicular, es decir que caen en línea recta. Nicaragua se ubica entre el trópico de Cáncer y la línea del ecuador, que es la mitad del mundo.
La Semana Santa podría ser más soleada en la región del Pacífico Occidental, afirmó Jiménez.
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Esto se debe a que existen más probabilidades de la formación de nubes en otras zonas, como la del norte, en la frontera con Honduras, y el Caribe al este, debido a las características del terreno en esos lugares.
Sin embargo, en general podrían predominar los cielos despejados para que los amantes del bronceado disfruten de los tonos que el sol les puede ofrecer.
A eso podrían sumarse las altas temperaturas que predominan normalmente en esta época del año como producto de la misma radiación solar.
El pasado 11 de abril Chinandega alcanzó una temperatura de 37.3 grados Celsius, Managua llegó a 35.9 grados Celsius y Ocotal a 34.4 grados Celsius.
El especialista dijo que se trata de temperaturas altas, pero que no son extraordinarias, ya que no han alcanzado las normas históricas alcanzadas en otros años.
Eso significa que la región de Occidente podría elevarse hasta los 42.0 grados Celsius y el resto de departamentos del país superaría los 30 grados y hasta los 35 grados Celsius.
Las altas temperaturas se deben a que los rayos del sol penetran hasta la superficie de la Tierra de forma más directa, al no encontrar nubes, y por más tiempo, ya que en estos días en Nicaragua amanece más temprano y anochece más tarde.
Jiménez dijo que la poca velocidad de los vientos contribuye a que el bochorno se sienta más fuerte, ya que no hay nada que refresque el ambiente.
Y la cereza de este “humeante” pastel la pone la contaminación del aire.
“Se va a notar la presencia de humo. Todo occidente nos reporta la presencia de humo, especialmente en Chinandega, además en Ocotal, Condega, San Isidro, Jinotega”, afirmó el meteorólogo.
La visibilidad en occidente en los últimos días fue de ocho a seis kilómetros en el horizonte, en Ocotal fue de seis, en Muy Muy de ocho, en San Isidro y Jinotega de cinco y en Condega hubo apenas dos kilómetros de visibilidad.
La presencia de humo se debe a las quemas agrícolas, ya que los productores se están preparando para la siembra de primera, debido a que se aproxima mayo, el primer mes de la época lluviosa.
A pesar de que cada año se intenta convencer a los agricultores de que no utilicen la quema para preparar los terrenos, la práctica continúa predominando.
En occidente influye la zafra que realizan los ingenios Monte Rosa y San Antonio.
Pero en el resto del país la situación ni siquiera es totalmente controlada. Prueba de esto son las 4,200 hectáreas de bosques pinares que se quemaron recientemente en Nueva Segovia.
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